Mi marido consiente todo a nuestra hija y si se lo recrimino me llama la atención, regaña y chilla

La labor de ambos padres en la educación de su hija es un trabajo en equipo. No es correcto ni beneficioso para ninguno la acción de desprestigiar, ni regañar entre ambos delante de la niña. Si usted o él actúa de una manera que al otro no le parece correcta debe de comentárselo a solas, porque esa situación le crea a ella la idea de que usted no pinta nada, por lo que irá aprendiendo del padre y nada de lo que le diga le hará caso, además de que con el tiempo puede adquirir al hábito de que cuando no le guste lo que le dice o le está llamando la atención sea su hija quien le conteste y acuda a su padre a refugiarse.
También comentarle que no es apropiado que el padre sea consertidor, su hija debe de aprender que cuando actúa de manera correcta recibe un premio, por ejemplo halagarla, cuando acabe los deberes podrá ver la televisión o jugar, salid de paseo cuando recoja o meriende... etc y cuando actúe de forma incorrecta recibirá un castigo, por ejemplo llamarla la atención, no salir, no ver la televisión o quitarle su juguete preferido... etc Pero esto se tiene que llevar a cabo por ambos, sino a él siempre lo verá como el bueno y a usted como la mala. Además de que si continúa consintiéndola creará a una niña dependiente, mimada y con malos hábitos.
Lo que hay que tener siempre en cuenta es que su hija no pinta nada, es decir, no tiene ninguna culpa si en cualquier momento le responde o no actúa como usted le pide porque es el resultado de la educación que ustedes como padres y adultos le están dando, por lo que si algo no es adecuado, si no han tomado cartas en el asunto será culpa vuestra.
Así que para beneficio de la niña y poder evitar males mayores, le aconsejo que hable con su marido y lleguen a un acuerdo, es decir, cuando le tengan que decir algo ya sea positivo o negativo a la pequeña deberán de hablarlo ustedes con anterioridad y tomar la decisión de que hacer juntos y después hablar con ella. También hay que darle margen y no ser todo blanco o negro, hay que negociar, es decir, no la consientan, ni le llamen la atención a primeras sino que hablen con ella de que debe hacer y qué recibirá a cambio, por ejemplo si haces los deberes podrás jugar un rato o si no te comes la comida no verás la televisión... etc pero siempre manteniendo la firmeza, no que uno de ustedes la "castigue" y el otro le dé mimos, si han decidido que le van a dar un premio o un castigo hay que mantenerlo. Porque si le prometéis un premio y no cumplís perderá la confianza, al igual que si le habéis impuesto un castigo y después cedéis, sabrá que puede salirle con la suya y hará con vosotros lo que quiera, los niños son muy inteligentes.
Espero haberle servido de ayuda. Cualquier aclaración cuente conmigo. Si no tiene ninguna duda más le agradecería que finalizase esta conversación mediante su puntuación para que pueda ser expuesta en la web, otras personas la lean y se beneficien.