Te diré que en el segundo tercio del siglo XI, el rey Ramiro I unió bajo su dominio los condados de Aragón, Sobrarbe y Ribagorza naciendo el Reino de Aragón. El nuevo reino ejerció una presión militar cada vez más agobiante sobre las tierras musulmanas del sur, que se tradujo a partir del año 1080 en una serie ininterrumpida de conquistas territoriales. Lógicamente, la ciudad de Huesca se convirtió en uno de los primeros y más codiciados objetivos de los aragoneses puesto que dejaba expedito el camino hacia Zaragoza y el valle del Ebro. No podemos olvidar que éstas acciones fueron quizás las únicas que podemos encuadrar claramente en el ámbito de las Cruzadas, con la salvedad que en lugar de reconquistar los Santos Lugares, podían luchar contra los infieles en su propia tierra.
El primer paso dado por los reyes de Aragón para la conquista de la Huesca musulmana fue la construcción a sus puertas del gran Castillo de Montearagón, unos 10 años antes de la toma definitiva de la ciudad en 1096. En el año 1094 el rey Sancho Ramírez intentó apoderarse de ella, pero murió en uno de los asaltos. Será finalmente su hijo Pedro I, que curiosamente firmaba sus documentos en árabe, quien lo consiga.
En la primavera de 1096 el ejército aragonés puso cerco a Huesca. Pero aunque el asedio duró 6 meses, la suerte final de la ciudad se decidió en una batalla campal, la Batalla de Alcoraz.
La batalla, librada a las afueras de Huesca, enfrentó de un lado a un gran ejército musulmán que acudió a socorrer la ciudad, a las ordenes de Al-Mustain, rey de Zaragoza y las de García Ordóñez, conde de Nájera y enemigo mortal del Cid, que contaba como auxiliares con tropas castellanas, y del otro, a las tropas de aragoneses y navarros bajo el mando de Pedro I, de acuerdo con Rodrigo Días. Los reyes aragoneses gobernaban en este momento sobre la mayor parte de Navarra, incluida Pamplona. La victoria fue para el rey Pedro, y Huesca, exhausta y desmoralizada, se rindió a los aragoneses pocos días después. Alrededor de la Batalla de Alcoraz se tejieron en época medieval leyendas que relataban la aparición de San Jorge en el fragor del combate. San Jorge se convirtió en patrón de Aragón ya en la Edad Media y tiene dedicada en Huesca una ermita.
Por lo que respecta a la reconquista de Zaragoza, éste enlace es uno de los más completos, aunque algo escueto, para mi gusto.
http://fyl.unizar.es/ATLAS_HA/40-49/44.htmlSaludos y mis disculpas por la tardanza.