El lenguaje no verbal

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Usuario desde:jueves, 03 de septiembre de 2009
País:España
Experto: No
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en Psicología
29/11/2012
Usuario
Recurro aquí ante la desesperación y porque la carga que siento sin poder hablar con nadie me está ahogando.
Tengo 40 años y estoy preparando el acceso a la universidad en la escuela para adultos.
Mi tutor y profesor de actualidad es muy majo y se desvive porque todo el mundo aprenda y no se quede atrás, además es muy cercano y todo el mundo le aprecia mucho, sobre todo los chicos que le ven casi como un "colega". Desde el principio se aprendió mi nombre compuesto, que es como me llama aunque no me gusta nada, mientras que al resto les pregunta como prefieren. Por no parecer borde le dejo que me llame como quiera, y ¡lo hace!, me desgasta bien el nombre. Un día, aún no sé cómo, mientras él escribía en la pizarra y yo copiaba, tiene la costumbre de morderse la punta de la lengua mientras lo hace, no sé por qué le miré la lengua y me pareció muy atractivo, y aparté la vista como si me quemase pensando ¿qué me pasa?. Pensé en el cielo de mi marido... Y se pasó. Ese mismo día me dijo que me quedase después de clase para comentar un trabajo. Me felicitó pues le había encantado y mientras me hablaba me arreglé el flequillo tras la oreja y vi que miraba al suelo igual que había hecho yo horas antes. No lo pensé más. La siguiente clase fue de lo más extraña, muy seco e imperativo conmigo, tanto que en una de esas él mismo se cortó del tono que tomaba; como tenía las manos frías crucé los brazos para calentarlas y vi cómo me miraba frunciendo el ceño... Pero la última clase me ha dejado k.o. Todo lo contrario amable, sonriente, repitiendo todo lo que yo decía, dándome la razón a todo incluso me ha empezado a llamar por mi nombre de pila. Corrigiendo una frase me dijo:"Esta es para ti", la palabra a rellenar era "seductora y atractiva" y la repitió cuatro veces como si estuviese sorda, y entonces sentí cómo me cruzaba una daga ardiendo la boca del estómago. Al terminar la clase tenía que preguntarle un par de cosas me acerqué y me clavó los ojos, esperé a que me dijese algo, pero siguió clavando los ojos sin pestañear, bajé la mirada me puse el abrigo y vi que seguía mirando sin moverse, y fui incapaz de decir palabra, noté que me temblaban las piernas, así que dignamente me dí la vuelta diciendo hasta mañana. Mientras salía recordé un libro que leí en filosofía del lenguaje no verbal y creí identificar algunos. Un día le pillé mirando por encima de mí cuando me siento la última, y hasta que no le miré no bajó la mirada, esto es lo que se llama perspectiva... ¿no?, ¿estoy loca?, ¿él también se ha leído el libro y está jugando?, ¿es todo fruto de mi imaginación?. Tengo un nudo en el estómago y no me centro para estudiar, y a quién le tengo que pedir consejo es a él que es mi tutor....mi marido también me nota muy despistada...estoy muy agobiada....gracias por aguantar el tostonazo. Lo siento.