Oración a Santa Marta. ¿Cómo hacerla?

Hola:

Quiero saber para qué sirve la oración de Santa Marta y cómo se debe realizar. Gracias

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Usted, de oraciones relacionadas a esta venerable santa puede encontrar muchas, desde absurdas, grotescas, inaceptables, blasfemas e incluso demoniacas, así como le digo, aunque no me crea.

En ese sentido, tenga cuidado a que fuerzas, poderes o espíritus invoca, pues que pueden tener en común, la Luz con las tinieblas. No se exponga, ni juegue con fuego, no se meta en cosas que desconoce, ni invoque espíritus o fuerzas por invocar, pues le puede causar daño o poner una influencia maligna ahí donde no la hay, no se deje engañar o seducir por la tentación de invocar espíritus o demonios.

Solamente espere y deposite toda su confianza en Dios, y nunca jamás se arrepentirá; para ello, Dios se sirve a veces de sus santos servidores (los verdaderos) que son aquellos que le llevan a Él, viven para El y sólo buscan su gloria y hacer su voluntad; es decir, el bien y salvación de las almas.

Si usted quiere acudir a la verdadera Santa Marta a fin que interceda por usted o sus necesidades ante Dios; pienso que debe saber mínimamente de algo de ella.

SANTA MARTA (Virgen y discípula de Jesús), en la Iglesia celebramos su Festividad el 29 de julio.

Santa Marta, es hermana de San Lázaro y Santa María Magdalena, por su solicitud y actividad en el servicio de Jesucristo, Nuestro Señor, es invocada como protectora especial de cosas urgentes y difíciles, ya que ella obtuvo con sus súplicas la resurrección de Lázaro.

San Juan nos dice que "Jesús amaba a Marta y a su hermana María y Lázaro" (Jn 11:5).

Lucas añade:

"Yendo ellos de camino, entró en un pueblo; y una mujer, llamada Marta, le recibió en su casa. Tenía ella una hermana llamada María, que, sentada a los pies del Señor, escuchaba su Palabra, mientras Marta estaba atareada en muchos quehaceres. Acercándose, pues, dijo: «Señor, ¿no te importa que mi hermana me deje sola en el trabajo? Dile, pues, que me ayude.» -Lucas 10:38-40

No podemos estar seguros de la motivación de Marta al hacer su petición al Señor pero todo parece indicar que se quejaba contra su hermana. Nuestro Señor aprecia el servicio de Marta, pero al mismo tiempo sabía que era imperfecto. Muchas veces nuestro servicio, aunque sea con buena intención, esta mezclado con el afán de sobresalir, la compulsión por ser protagonistas, la competencia para sentirnos que somos los mejores. Es entonces que salen las comparaciones. ¿Por qué la otra no hace nada y soy la que trabajo?

El Señor corrige a Marta, penetra en su corazón afanado y dividido y establece prioridades:

«Marta, Marta, te preocupas y te agitas por muchas cosas; y hay necesidad de pocas, o mejor, de una sola. María ha elegido la parte buena, que no le será quitada.» -Lucas 10: 41-42

Esa única cosa de la que hay necesidad es de poner todo el corazón en amar a Dios, atender a Jesús que nos habla, que quiere levantarnos de nuestra miseria.

El capítulo 11 de San Juan narra el gran milagro de la resurrección de Lázaro. En aquella ocasión vuelve a hablarse de Marta. Lázaro se agravó de muerte mientras Jesús estaba lejos. Las dos hermanas le enviaron un empleado con este sencillo mensaje: "Señor aquel que tú amas, está enfermo". En un mensaje de confianza en que Jesús va actuar a su favor.

Pero Jesús, que estaba al otro lado del Jordán, continuó su trabajo sin moverse de donde estaba. A los apóstoles les dice: "Esta enfermedad será para gloria de Dios". Y luego les añade: "Lázaro nuestro amigo ha muerto. Y me alegro de que esto haya sucedido sin que yo hubiera estado allí, porque ahora vais a creer".

A los cuatro días de muerto Lázaro, dispuso Jesús dirigirse hacia Betania, la casa estaba llena de amigos y conocidos que habían llegado a dar el pésame a las dos hermanas. Tan pronto Marta supo que Jesús venía, salió a su encuentro y le dijo: "Oh Señor, si hubieras estado aquí no habría muerto mi hermano; pero aún ahora yo sé que cuánto pidas a Dios te lo concederá"

Jesús le dice: "Tu hermano resucitará".

Marta le contesta: "Ya sé que resucitará el último día en la resurrección de los muertos".

Jesús añadió: "Yo soy la resurrección y la vida. Todo el que cree en mí, aunque haya muerto vivirá. ¿Crees esto?"

Marta respondió: "Sí Señor, yo creo que Tú eres el Cristo, el Hijo de Dios, el que tenía que venir al mundo."

Jesús dijo: "¿Dónde lo han colocado?". Y viendo llorar a Marta y a sus acompañantes, Jesús también empezó a llorar. Y las gentes comentaban: "Mirad cómo lo amaba".

Y fue al sepulcro que era una cueva con una piedra en la entrada. Dijo Jesús: "Quiten la piedra". Le responde Marta: "Señor ya huele mal porque hace cuatro días que está enterrado". Le dice Jesús: "¿No te he dicho que si crees verás la gloria de Dios?". Quitaron la piedra y Jesús dijo en voz alta: "Lázaro ven afuera". Y el muerto salió, llevando el sudario y las vendas de sus manos.

El Banquete

Marta aparece también en un banquete en el que participa también Lázaro, poco después de su resurrección: también esta vez aparece Marta como la mujer ocupada en el servicio, pero puede ser que para entonces ya lo sabía someter al Señor con mas amor, sin quejarse ni compararse.

De los años siguientes de la santa no tenemos ningún dato históricamente seguro, aunque según la leyenda de la Provenza, Marta fue con su hermana a Francia y evangelizó Tarascón. Ahí se dice que encontraron, en 1187, sus pretendidas reliquias, que todavía se veneran en su santuario.

Los primeros en dedicar una celebración litúrgica a santa Marta fueron los franciscanos en 1262, el 29 de julio, es decir, ocho días después de la fiesta de santa María Magdalena, impropiamente identificada con su hermana María

Es Patrona de las cocineras, sirvientas, amas de casa, hoteleros, casas de huéspedes, administradores de hospitales, escultores, pintores, lavanderas, de las hermanas de la caridad, moribundos y del hogar.

Aquí algunas oraciones:

Oración de las madres de familia a santa marta

Oh Santa Marta dichosa, que tantas veces tuviste el honor y la alegría de hospedar a Jesús en el seno de tu familia, de prestarle personalmente tus servicios domésticos, y que juntamente con tus santos hermanos Lázaro y María Magdalena, gozaste de su divina conversación y doctrina, ruega por mí y por mi familia, para que en ella se conserve la paz y el mutuo amor, para que todos sus miembros vivan en la observancia de la Ley de Dios, y para que sólo Dios, y no el mundo ni el pecado, reine en nuestro hogar. Libra a mi familia de toda desgracia espiritual y temporal, ayúdame en el cuidado de mis hijos y subordinados, y concédeme la dicha de verlos unidos bajo la mirada paternal de Dios en la tierra, para volver a verles reunidos en las moradas del cielo. Así sea

Oración para los que mantienen casas de huéspedes

Amable protectora mía, Santa Marta, que tuviste la inefable dicha de hospedar a Jesús en tu casa. Dichosa tu mansión de Betania, bendecida tantas veces con la presencia del Huésped divino, y cuyos moradores, tú misma y tus santos hermanos Lázaro y María Magdalena, fuisteis tantas veces honrados con las vi sitas de Jesús, de su Madre Santísima y de los Apóstoles. No permitas, Santa mía, que entre los que se hospedan en mi casa haya ninguno que hospede en su corazón al demonio, sea motivo de escándalo, o atraiga con su mala conducta las iras de Dios sobre mí y mi familia.

Santa bendita, que viviste en compañía de santos, bendice mi casa, bendice a mis huéspedes, para que en todos reinen la concordia y el amor de Dios. Ayúdame en el cumplimiento exacto de mis deberes y en la administración de mis bienes y negocios, para que aun cuando, por mi condición y estado de vida, tenga que ocuparme de las cosas de la tierra, jamás me olvide que mi patria verdadera y mi último destino es el cielo. Así sea

Los veintinueve de cada mes a santa marta

Oh Santa Marta milagrosa, me acojo a tu amparo y protección entregándome a ti, para que me ayudes en mi tribulación, y en prueba de mi afecto y agradecimiento, te ofrezco propagar tu devoción. Consuélame en mis penas y aflicciones, te lo suplico por la inmensa dicha que alegró tu corazón al hospedar en tu casa de Betania al Salvador del mundo; intercede por mí y por toda mi familia para que conservemos siempre en nuestros corazones a nuestro Dios viviendo en su gracia y detestando toda ofensa contra El; para que sean remediadas nuestras necesidades y en especial esta que ahora me aflige (hágase la petición). Te suplico me ayudes a vencer las dificultades con la fortaleza con que venciste, por el poder de la Cruz, al dragón que tienes rendido a tus pies. Así sea.

Rezar tres veces el Padrenuestro. Avemaría y Gloria

Nota.- Para aquellos que hacen los veintinueve de cada mes, se recomienda confesarse y comulgar cada martes, visitar el altar de la Santa y dar en su honor una limosna a los pobres.

Alabado Sea Jesucristo.

¡Gracias! 

Hola Viajero881: Al principio de la lectura de su respuesta me asusté mucho. Pensé que estaba rezando la oración incorrecta. Desconocía mucho de Santa Marta y gracias a su acertada respuesta sé un poco más de esta maravillosa santa. 

Seguiré sus consejos y haré las oraciones. Mil gracias nuevamente

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