Realmente lo que leo es que el muchacho ha estado en centros de rehabilitación, pero sospecho que la raíz del problema va más allá. ¿Cómo es su relación con papá-mamá? ¿Por qué motivo se le permitía beber siendo menor de edad? Entiendo que, como padres queremos lo mejor para nuestros hijos, pero ojo, que a veces el amor nos puede cegar. Por ejemplo, ¿de dónde saca dinero para el alcohol? Y si el dinero es producto de su trabajo, entonces debes empezar a exigirle que ayude en el hogar, sino deberá buscar su propio camino. Veo en tu escrito preocupación de que si el muchacho se va, entonces crees que pueda terminar en la calle o posiblemente ya lo haya hecho. Un chico con 24 años ya debería estar a punto de graduarse o al menos estar cursando la universidad, si no es posible estudiar, entonces debe ocuparse en algún empleo, ya que el ocio es la madre de los vicios. Por otro lado, si el muchacho se empeña en seguir con el alcohol, déjale claro que en casa no podrá valerse de comida, internet, plan de teléfono móvil, etc. Es muy importante que toda la familia se una y nadie le brinde beneficios hasta que no muestre voluntad y mejoría, porque es muy probable que él ya sepa a cual miembro de la familia recurrir para manipularle emocionalmente, conseguir dinero o beneficios y seguir así. Debes ser fuerte y tener carácter de decirle NO a todas sus pretensiones, ten siempre presente que no lo haces por mal, sino por el mismo amor que le tienes. Recuerda que, desafortunadamente a veces los seres humanos necesitamos tocar fondo y vernos en mal estado para decidir cambiar. Cuando eso ocurra, deben animarlo al menos a iniciar asistiendo a alcohólicos anónimos y ojalá de ser posible, a terapia en familia. Un abrazo y buena suerte.