Esto de las expulsiones de clase me parece un asunto harto particular, más en la etapa obligatoria.
Sabemos que todos los centros escolares tienen un reglamento de régimen interno y aquí es donde abro el debate, que quizá es el que debieras plantear en el centro a modo de queja:
El art. 27 CE, dentro del Título I de los derechos y deberes fundamentales, en su apartado 4 dice que:
"La enseñanza básica es obligatoria y gratuita."
En el desarrollo del art. 27 CE, encontramos la Ley Orgánica 2/2006, de 3 de mayo, de Educación, que reiteradamente se refiere a la etapa de entre 12 y 16 años como de obligatoria escolarización.
Por último, vemos que el reglamento de régimen interno asocia a un determinado comportamiento, que no entro a valorar pues desconozco todos sus extremos pero si sus efectos, una sanción de un mes expulsados de clase (Su hijo y su amigo)
El art. 9.3 CE alude al principio de jerarquía normativa. Principio que proclama que ninguna norma (norma, ley, reglamento de régimen interior) puede contravenir una norma de rango superior.
Y aquí mi razonamiento: Si la Constitución Española, norma suprema del ordenamiento jurídico español, y una Ley Orgánica que viene a desarrollar el derecho a la educación marcan como obligatoria la enseñanza, ¿Cómo es posible que un reglamento de régimen interno de un centro ningunee dos normas de rango sobradamente superior a él dejando sin valor la obligatoriedad de un derecho fundamental como es la educación?
Mi respuesta, así a "bote pronto" que los profesionales del centro de su hijo no quieren complicarse las cosas mucho mas y la opción es que aguante a cada niño su padre y su madre.
Sinceramente, con este argumento me iría al director del centro y se lo expondría. Asuma que el castigo a su hijo se puede alargar en el tiempo a base de no tener recreo, cuestionable igualmente por convenciones internacionales, etc, o a tener que permanecer más tiempo en el centro, pero ningún reglamento de régimen interno puede contradecir la CE ni Leyes Orgánicas de rango superior al reglamento.
En caso de que se mantenga el castigo puede plantearse iniciar una cruzada contra las expulsiones en los centros escolares de educación obligatoria hasta el punto que los tribunales de justicia tengan que pronunciarse sobre la legalidad de una normativa interna tan usada como inconstitucional.