Seguros de vida

Puede tener todos cuantos seguros de vida riesgo desee, pueda pagar y le dejen hacer.

A la vida no se le puede poner precio, de ahí que puede tener tanto un seguro de un millón de euros, como diez seguros de cien mil euros, o veinte de cincuenta mil.

Más que la vida, lo que se valora es la posibilidad de muerte mediante la edad y el estado de salud, y luego, además, tendrán en cuenta la profesión, el patrimonio, etc.

Es decir, si Ud. es un operario y se hace un seguro de vida de seiscientos mil euros, pues es sospechoso, pero si Ud. es un consejero delegado de una multinacional, lo consideraran normal.

Otra cosa distinta es que la aseguradora le pida en cuestionario si tiene otros seguros de vida y sus capitales, pues la contratación de dicho seguro dependerá de la respuesta.

Antes era una pregunta muy común, pero hoy en día, lo han simplificado tanto que ya no la veo por ningún lado.

En definitiva, si Ud. responde verázmente el cuestionario que se le pida y aceptan contratar lo que Ud. desea, no hay límite. Es decir, el límite lo pone Ud. cada una de las Aseguradoras con las que contrate.

Respecto a si es embargable no lo sé con seguridad, pero entiendo que NO, por una razón.

Un seguro de vida (riesgo) no es más que un contrato que se hace efectivo en el mismo momento en que fallece el asegurado, por tanto, hasta que fallece no hay donde rascar.

Luego, en cuanto fallece, el capital asegurado pertenece al beneficiario (si bien los herederos o acreedores podrían reclamar, etc. -algo que no termino de entender-), pero lo cierto es que al ser un capital de un beneficiario que -no tiene por que tener nada que ver- con el asegurado, difícilmente se le puede reclamar una deuda que él no tenía, sino que la tenía el fallecido, por lo que entiendo sí se podría reclamar a sus herederos, pero es que el beneficiario de un seguro de vida está -por encima- de los herederos, de ahí mi conclusión.

Conclusión de apasionado (no de experto).

Creo que le correspondería más a un abogado especialista en derecho de familia, herencias, etc.

Si no le vale, planteelo de nuevo.