Causas del divorcio

Para el divorcio vincular puede hacerse el trámite por presentación conjunta, o sea, de común acuerdo. Es un proceso no controvertido, por lo que no hace falta demostrar ninguna imputación de culpa de ninguno de los cónyuges. El proceso es mucho más sencillo, y si hay hijos de por medio, la cosa es mucho menos caótica o traumática. En Argentina se puede optar por la presentación conjunta después de 3 años de la celebración del matrimonio y se le dice al juez que hay causas que hacen moralmente imposible la vida en común, no necesitan dar mayores explicaciones.
También es causal de divorcio la separación de hecho sin voluntad de unirse por un lapso mínimo de 3 años desde que terminó la convivencia.
Las alteraciones mentales graves y permanente por alcoholismo, droga si hacen imposible la vida en común.
Después están las causas subjetivas que implican culpa del cónyuge, lo cual se torna difícil la prueba y en un proceso contradictorio las cosas pueden dilatarse demasiado. Se trata muchas veces de probar la culpa para que surja algún tipo de indemnización. Las causas por imputación de culpa son adulterio, instigación al otro cónyuge a cometer delitos, atentado contra el cónyuge o sus hijos comunes o no, injurias graves y abandono voluntario y malicioso.
Probar el adulterio, dado el tema de la intimidad se complica, pero tenés que recurrir a presunciones concordantes y graves para que pueda reconocerse como prueba, como por ejemplo que el cónyuge salga de un hotel para parejas con alguien que no es su esposa. También por reconocimiento de un hijo extramatrimonial. El abandono voluntario y malicioso es algo que también debe tener un especial cuidado. Porque quien hizo abandono del hogar para no ser sancionado debe probar causas que lo justifiquen, como por ejemplo la violencia en el hogar. Y en el resto de los casos de imputación de culpa la prueba también se torna difícil, aunque no imposible.
Conclusión, lo más saludable es la presentación conjunta. Un proceso no controvertido.