Freud y rogers

En primer lugar, ambos se "encuadran" en psicologías distintas, pues Freud, como es sabido, fue el fundador del psicoanálisis, mientras que Rogers se encuadra dentro de la psicología humanista, como terapia centrada en la persona y la experiencia. Sin embargo, ambos son probablemente los más "sonados" en psicoterapia, primero Freud y luego Rogers.
Para Freud, la personalidad se iría construyendo durante la infancia y adolescencia en base a las pseudoresoluciones que el Yo va realizando sobre el conflicto constitutivo entre los deseos (Ello) y las normas (superyó). El carácter defensivo del Yo será por tanto la clave para entender las neurosis y los trastornos mentales en general. Estructuralmente, el psiquismo humano tendría tres instancias, el ello, el yo y el superyó, que actúan a nivel consciente e inconsciente, donde el Ello sería en su mayor parte inconsciente.
Para Rogers, la personalidad se va desarrollando desde la infancia y hasta que se fallece en virtud de la tendencia natural de los individuos a la "actualización", hacia el crecimiento y la expansión. Estructuralmente, diferencia entre "el organismo", que sería el centro de toda experiencia, y "el self", que sería aquella parte de la experiencia relativa a las propias características y capacidades. El estado de "incongruencia" que conlleva el desarrollo de la persona (entre lo que se debería ser y lo que se es), es el origen de los trastornos mentales, como reacción para salvar el self.
Como vemos, ambos colocan el origen de la anormalidad psíquica en el conflicto, conflicto insoslayable y constitutivo del propio individuo, por lo que los síntomas tendrán un carácter funcional. Sin embargo, ambos adolecen de introducir dentro, dentro del individuo, lo que en realidad está fuera, a saber, el conflicto y sus pseudoresoluciones, y con los que la persona tiene que lidiar en la vida.