¿Qué me pasa en el oído?
Tengo 21 años.
Vivo en la ciudad a 2300 metros del nivel del mar. Hace 2 meses fui a la playa y nadé en alberca y en el mar. Cuando regresé a los 2 días sentí mi oído como tapado y a siguientes estaba tapado y también me dolía muchísimo, tanto que no me dejaba dormir. Estuve así 3 o 4 días y después se me quitó pero ahora noto que desde ese día escucho los latidos de mi corazón en ese oído (derecho). Hay veces que no lo escucho pero otras en las que incluso cuando estoy en reposo. Ya he ido al médico pero me dijeron que seguramente es agua pero ya ha pasado mucho tiempo.
¿Qué puede ser lo que tengo? Ya que siempre me dicen lo mismo y ni siquiera me revisan.
¿Puede ser grave? Antes no lo tenía hasta que me dio esa infección o lo que fuera.
¿Tiene qué ver con que fui a la playa?
Cuando me fui a revisar lo de mi infección ya casi se me había quitado y me dijo el médico que fue por el cambio de presión pero no me revisó sólo me dijo eso.
1 respuesta
Lo primero de todo tranquilo.
Evidentemente pillaste una buena infección en su momento con el agua y todavía arrastras alguna secuela. Esa inflamación, oído tapado, dolor... Todo eso fue a consecuencia de la infección y el sonido del latido del corazón también.
Desde ese día de la infección, el oído ha quedado un poco aislado o apartado del resto en lo que a circulación sanguínea se refiere y la circulación sanguínea por el oído derecho tiene que ser mayor de lo normal para compensar ese problema que se originó con la infección, de ahí que el sonido del corazón llegue a oírse en el oído derecho, cuando lo normal es que no se oiga este sonido (aunque realmente si todos tuviésemos una superaudición estilo Daredevil lo oiríamos siempre).
Ese sonido pulsátil ira poco a poco a menos, a medida que se recupera el oído de la secuela de la infección. Date tiempo. Es lento ese problema.
Me gustaría que dentro de unas semanas me volvieses a escribir y me cuentas.
Un saludo, animo y date tiempo. No te agobies, de verdad.
JP
Hola de nuevo.
Pues ya pasó un rato desde que le escribí. Fui al médico y me dijo que era una inflamación y me dio antiinflamatorios y me funcionó un rato pero otra vez escucho el mismo ruido y a veces lo escucho más fuerte.
¿Puede llegar a ser peligroso?
¿Me puede desembocar en otros problemas?
Gracias por su atención.
No te preocupes. Peligroso no es en absoluto, pero todavía no se te ha recuperado del todo ese oído. Debes de seguir teniendo paciencia.
Ira a mejor, con tiempo. Cuando lo notes peor haz dos cosas: tomate un antiinflamatorio después de comer y tranquilizate. El antiinflamatorio te ayudara a bajar la inflamación de la trompa de eustaquio y estar tranquilo es fundamental para no aumentar el volumen de forma temporal inconscientemente del ruido.
Tranquilo, paciencia, que esto va por buen camino. En serio.
Disculpe que haya tardado tanto en contestar.
He viajado de nuevo a la costa e iba todo bien hasta hace unos días que me empezó a doler el oído. Lo que sí noté es que ya no escucho correr mi sangre pero ahora me duele de nuevo. Supongo que será por cosa de la presión porque esta vez usé tapones para los oídos nuevos y limpios. Actualmente estoy en la costa pero ahora sólo me duele, no escucho tapado ni zumbidos.
¿Me recomienda usted que me medique o dejo que sane solo?
Ya veo que has mejorado mucho. Ya te queda poco. Me alegro de veras.
Estando en el punto que estas no haría nada de medicacion. Ese dolor ira a menos.
Lo que si me ha llamado la atención es que hablas de unos tapones. Estos tapones supongo que solo los usaras para nadar, porque es malo usarlos si va a haber un cambio de presión, por ejemplo: submarinismo o buceo, avión o incluso viajar a tu ciudad o volver de 0 a 2300 metros o al revés. Los tapones son buenos para que no entre el agua en el oído (o para reducir el ruido externo), pero son malos si va a haber un cambio de presión, porque al estar tapado el oído, no se puede realizar una compensación de presión en el mismo y la presión se va acumulando en el oído, produciéndose dolor solamente en el mejor de los casos.
A seguir adelante, poco a poco y con cuidado.
