Los días retrasos regularmente coinciden con los días que debes esperar para hacer la prueba.
Las pruebas de embarazo miden la cantidad de hormona HCG en la sangre.
Esta es la explicación:
Una vez fecundado, el cigoto (producto de la fecundación del óvulo por el espermatozoide) migra desde las trompas hacia el útero. Esta migración es de 6 a 12 días. Durante este tiempo, el cigoto se convierte en un embrión y desarrolla el trofoblasto, un grupo de células que dará lugar a la placenta. Es el trofoblasto quien produce la hormona hCG.
En la mejor de las hipótesis, la hormona hCG comienza a ser producida 6 días después de la fecundación; en la peor de las hipótesis, 12 días después de la fertilización. Solamente por esta explicación ya se puede entender por qué no tiene ningún sentido hacer una prueba de embarazo unos días después de una relación sexual sin protección. Si aún no ha iniciado la producción de CG por el embrión, no hay ninguna manera de que la prueba de embarazo tenga resultado positivo.
Después del inicio de la producción de hCG, son necesarios algunos días para que ella alcance una concentración sanguínea suficiente para que pueda ser detectada por los exámenes de sangre más sensibles, son necesarios otros 2 a 4 días para que haya cantidades relevantes de hCG en la sangre.
En la explicación comenta que son 12 días en lo que el cigoto se convierte en embrión y empieza a generar la hormona HCG, pero además hay que esperar de 2 a 4 días más, para que haya suficiente hormona HCG para ser detectada en las pruebas.
No tiene que ver con el retraso de la regla, más bien tiene que ver con la fecha de concepción, es decir, con la fecha en que tuviste relaciones.
Después de 16 días, la prueba de sangre es fiable.
Lo que tienes es un retraso por estrés o por algún medicamento que tomaste, o incluso, por un cambio en tu alimentación.
Tranquila tu periodo llegará.