A día de hoy, con la nueva legislación de la Unión Europea y nacional, con la probación de la ley 3/2018, el concepto de las obligaciones en relación a la protección de datos ha cambiado completamente en relación a la anterior normativa.
Se trata de un proceso continuo y por lo tanto, se debe analizar (en nuestra opinión anualmente) la mejora de los protocolos y procedimientos que se establecen, en función del nivel de protección necesario para el nivel de seguridad de lo datos a tratar. Si usted tiene que realizar una evaluación de impacto previa al tratamiento de los datos, en nuestra opinión y a la espera del futuro Reglamento, esto se debe revisar no solo cuando haya cambios en los tratamientos o nuevos tratamientos, sino de forma continuada en el tiempo, para mejorar la medidas técnicas y organizativas.