Eso tendrías que haberlo pensado antes; ahora yo te diría que no empeores la situación matando a tu hijo, si es que has concebido. Lo que te recomiendo es acudir a la Confesión Sacramental. Ahora ya no estás en posición de elegir. Es un engaño que no estés preparada; si Dios te confía un hijo, te brindará los medios. Para lo que nunca se está preparado, ya que siempre es muy perjudicial, es para hacer lo que piensas.
No te dejes engañar por el mal; el pecado siempre es malicia y engaño; te engaña con una supuesta solución que no es tal, sino que es un empeoramiento de todo; y luego no hay marcha atrás, aunque siempre puede uno arrepentirse, pero claro que con un arrepentimiento doloroso, ya que el mayor dolor en esta vida es el remordimiento.