Cooperativa de Viviendas: consultas legales
En el año 2011 escrituramos una vivienda siendo socios cooperativistas de una Cooperativa de Viviendas. Al escriturar nos dimos de baja en la Cooperativa, ya que fue un acuerdo al que llegamos en Junta, que aquel socio que escriturara la vivienda podía solicitar la baja y se le concedería. La razón era porque la Cooperativa tenía muchas deudas, los precios de las viviendas eran muy altos por la mala gestión y de 49 cooperativistas muy pocos estaban dispuestos a escriturar, por lo que los socios que escrituramos no queríamos tener cargas o deudas después de hacer el esfuerzo de escriturar la vivienda como es lógico. Además, cada socio había firmado una póliza de afianzamiento con la entidad bancaria de 140.000 euros que se libraría a todo aquel que escriturara.
Sólo escrituramos 12 socios y ahí empezó nuestra odisea. Al principio la entidad bancaria nos ayudó en el mantenimiento del edificio e intentó vender viviendas, pero como los precios eran muy altos en aquel momento no se vendió ninguna. Al año el préstamo promotor paso a la SAREB (banco malo) y la entidad bancaria se desentendió de todo y, por supuesto, nada se supo de la ejecución de las pólizas de afianzamiento de los 37 socios restantes que no escrituraron la vivienda elegida y además desaparecieron.
Para más inri, unos meses antes de escriturar las viviendas el presidente de la Cooperativa dimitió y nadie quería coger la Presidencia. Finalmente cogió la Presidencia de la Cooperativa un socio que no tenía intención de escriturar ninguna vivienda y de hecho han pasado 10 años y sigue siendo presidente sin ser propietario de ninguna vivienda.
Pasamos momentos muy difíciles para mantener el edificio, fuimos subsistiendo gracias a un dinero recibido por una compensación de una servidumbre de paso con el edificio colindante. Pero 3 años después se acabó el dinero y no podíamos mantener el edificio. La inacción de la Cooperativa y de la Sareb era total y forzamos al Presidente de la Cooperativa a buscar una solución, ya que la Cooperativa no pagaba Cuotas de comunidad y tenía la obligación de hacerlo. Decidieron alquilar las viviendas a unos precios irrisorios muy por debajo de lo que se alquila en esta zona de la ciudad que es muy cara, y claro eso nos ha llevado desde el 2015 a tener pisos con prostitución ( que conseguimos echar con demanda judicial), vecinos que no cumplen normas de convivencia, continuos cambios de inquilinos en las viviendas con sus numerosas mudanzas, .. ... Y mientras ni la Cooperativa ( sólo con la figura del presidente) ni la Sareb han movido un dedo. Sólo han habido promesas de que se van a vender las viviendas, que esto se va a solucionar,...
La cuestión es que al Presidente (que no es propietario de vivienda alguna) le viene muy bien esta situación porque con los alquileres está recibiendo unos 300.000 euros anuales y ya van algo más de 6 años, por lo que calculamos que hasta ahora han tenido que recoger 1.800.000 euros. Con ese dinero se habrá pagado a Hacienda 400.000 euros que debía la Cooperativa, unos 300.000 euros en IBI de los 10 últimos años, 180.000 euros de Cuotas de Comunidad de los últimos 8 años y suponemos que el IVA o impuesto de los alquileres, pero todavía queda mucho para llegar al 1.800.000 euros, por lo que está claro que el dinero se está yendo a algún sitio y los propietarios que ya no somos cooperativistas y vivimos en el edificio somos los que estamos sufriendo lo peor en el día a día. El Presidente de la Cooperativa no se dá de baja ni abandona la Cooperativa porque se está beneficiando de ella.
¿Es legal que el Presidente de la Cooperativa después de 10 años siga siendo el Presidente si no es propietario de vivienda alguna incumpliendo el fin de la Cooperativa que era hacer viviendas para los socios? ¿Podemos los propietarios tomar alguna medida legal y de qué tipo para echar al presidente y que se pongan las viviendas en venta, que es lo que interesa? Por favor, si alguien nos puede ayudar lo agradeceríamos mucho.
2 respuestas
Ustedes ya no pertenecen a la cooperativa, por lo que cualquier acción en el seno de la misma (echar al presidente) no procede. Aún así, solo las cooperativas de menos de 10 componentes pueden tener presidente, y no Consejo Rector, que es lo normal. Por lo demás, poner a la venta algo jamás puede ser obligatorio, pues la venta, por definición, es un acto voluntario; y la compra también lo es. Serán los cooperativistas quienes velen por su interés, como es lo relativo a las cuentas y a la venta de los pisos. Pero como no pueden ustedes intervenir directamente, han de promover la inspección de esa situación de patología societaria y promover la disolución de la cooperativa si fuese necesario. Tienen que redactar un escrito de denuncia muy completo y elocuente, y presentarlo en la Inspección de Trabajo y Seguridad Social del Ministerio de Trabajo y Asuntos sociales, a fin de que se instruya expediente contra la dirección y se proceda en su caso a la descalificación de la cooperativa. Pueden hacerlo en calidad de interesados. Se les sugiere el auxilio de un profesional.
Igual es descabellado, ¿pero habéis pensado los propietarios en hacer otra cooperativa y comprar las viviendas que le quedan a la antigua cooperativa?
Puede ser que si hacéis una oferta por todo al banco malo, os lo de a un precio bueno. Luego la gestión vuestra de las viviendas para venderlas o alquilarlas os puede reportar tranquilidad y dinero.
¡Gracias! No es mala idea, el problema es que sólo somos 12 las personas que escrituramos y los 37 cooperativistas restantes desaparecieron, por lo que comprar 66 viviendas entre los 12 es difícil por la elevada suma de dinero que hay que pedir.
Uff, son muchas y sois pocos.