Taller por tercera vez

¿Aún se resiste ese taller a ser diseñado? Pues por el interés de ambos que no sea y ahora vamos con esa respuesta:
A un automático le puedes conectar todos los aparatos que tú quieras siempre que la intensidad que consuman de forma simultanes todos los receptores conectados a este no supere su intensidad de disparo.
Pero ahora fíjate en el siguiente ejemplo: Imagina que conectas a un único automático dos montacargas y todo va de maravilla, pero mira por donde el día que más falta nos hacen los montacargas a uno de ellos el motor se le estropea provocando un cortocircuito en este, como es lógico la protección actuará dejando fuera de servicio al montacargas averiado... y también al otro que está sano (por estar conectados a la misma protección) ¿Qué hacemos? Volver a rearmar el automático no sirve ya que estaríamos alimentando a los dos montacargas (al "sano" y al "muerto") ya que volvería a disparar la protección. Entonces ¿qué solución hay? Lo único que se puede hacer para restaurar el servicio del montacargas que funciona bien (y para poder proseguir con la actividad) es desconectar los cables del montacargas averiado del automático que cuelga, algo completamente inadmisible cuando si se hubiera puesto una protección por montacargas este problema hubiera desaparecido ya que el automático hubiera dejado fuera de servicio el montacargas averiado y el resto de la instalación seguiría funcionando sin ningún problema.
Con esto quiero decirte que utilices todas las protecciones que sean necesarias no solo para proteger a los receptores sino también para asegurarte una instalación eléctrica lo más funcional posible, de forma que las averías que tengas en la instalación eléctrica (y en maquinarias muy específicas) no afecten al buen funcionamiento de la actividad que estás proyectando.
Pues después de este discurso creo que tu duda ha quedado más que despejada (o eso espero)