Enfermedad perra

La leishmaniosis es una enfermedad infecciosa, pero producida por un parásito protozoo, no por una bacteria o un virus. Al ser un protozoo (más complejo que una bacteria o un virus), aún no se han conseguido vacunas efectivas. Es contagiosa, pero sólo se transmite por la picadura de un mosquito. Se puede transmitir al hombre, pero por lo general, el sistema inmune de las personas es resistente al parásito y no se da la enfermedad (repito que se transmite por un mosquito, da igual que tengas perro con leishmaniosis o no, el que lo transmite es el mosquito).
No tiene cura, pero sí es posible controlarla. En la zona donde trabajo hay mucha incidencia de leishmaniosis, y hay muchos perros que están muy bien aunque tienen la enfermedad hace años.
Te puedo decir que lo más ético es tratar al animal (con el tratamiento caro, porque el otro no sirve) o sacrificarlo. Es una enfermedad degenerativa, el estado del perro va a ir a peor día a día y la enfermedad, si no se trata, es mortal. Para evitar que sufra y no tenga una calidad de vida aceptable, es preferible sacrificarlo. Además, un perro enfermo de leishmaniosis que no se está tratando, cada vez que salga al campo, va a haber posibilidades de que le pique un mosquito y chupe parásitos que luego pueda transmitir a otro perro y extender la enfermedad. Por todo esto, si se decide no tratar, lo que se debe hacer es sacrificar al animal. Por los demás perros, y también por su propia calidad de vida.
Si te decides a ponerle el tratamiento, primero hay que hacerle un análisis de sangre para ver si tiene afectado el riñón y el hígado, porque el tratamiento inyectable no se puede poner si tiene mal el riñón. En los últimos meses ha salido un medicamento nuevo que sí se puede dar aunque tenga un problema renal, no es inyectable sino mezclado en la comida, pero sale aún más caro que el inyectable.
El tratamiento inyectable consiste en unas inyecciones todos los días, durante 20 días, una vez al día. Las inyecciones son subcutáneas y las puede poner el mismo dueño (si no le da grima poner inyecciones). El líquido es un poco espeso y pica, por lo que a veces los perros lo pasan mal a la hora de pincharles. Además, es un tratamiento fuerte que puede hacer que la primera semana el perro tenga náuseas o esté algo decaído (algo más que antes de poner el tratamiento). Además, hay que darle unas pastillas para protegerles el hígado (mientras duran las inyecciones hay que darle dos veces al día, después y para toda la vida una vez al día). Un mes después de tratar al perro (o bien con las inyecciones o bien con el otro medicamento nuevo que te he comentado que se da mezclado con la comida) hay que hacerle un análisis de sangre para ver cómo está evolucionando la enfermedad. Si está bien, este mismo análisis se repite a los tres meses, y luego 6 meses después. Si en alguno de estos análisis, el resultado no es bueno, habría que repetir el tratamiento (las inyecciones los 20 días).
Normalmente con uno o dos ciclos de inyecciones, el perro mejora mucho. Hay veces que se necesitan 3 ciclos, pero también es verdad que muchas veces con uno solo es suficiente. Eso depende del estado general de cada perro y de la infección que tenga.
Las inyecciones, para un perro que pese unos 15 kg (supongo que pesará más o menos eso tu perro) cuestan más si en la farmacia compras el "glucantime" (así se llama el medicamento) de veterinaria. También existe glucantime de humana, y cuesta 4 veces menos (aunque es exactamente igual), pero es más difícil de conseguir. Para un perro de 15 kg, el precio de las ampollas de un ciclo de inyecciones sería de unos 82 euros si es de veterinaria y de 13 ó 14 euros si es de personas. Aparte hay que tener en cuenta las pastillas, los análisis, y en ocasiones un pienso especial para el riñón o el hígado si está dañado.
El tratamiento es caro, pero si lo toleran bien, pueden salir adelante. Lo que no deberías hacer es conformarte con ponerle un colirio en los ojos y darle las pastillas, porque es como si te rompes una pierna y te pones una tirita en el dedo...