¿Sufro o no de ansiedad?

Por lo que cuentas, tanto la hospitalización como las pruebas solicitadas por tu médico, pienso que habrán podido descartar de modo razonable algún origen físico a tus síntomas. El sentirse mareado es un síntoma inespecífico que abarca varios cuadros clínicos, y con varios orígenes, siendo uno de ellos la ansiedad. Yo creo que con la historia clínica, exploración, y evolución, se habría podido ver si hay alguna razón para pensar en el origen cerebral (por lo que dices del TAC cerebral), por la presencia de otros síntomas, evolución, etc. Por supuesto, que la presencia de ansiedad no descarta otra patología, pero hay que tener en cuenta de que la ansiedad puede explicar este tipo de síntomas, y también puede ocurrir la búsqueda no justificada de otra patología.
Por supuesto, que la medicina no es una ciencia exacta, por eso te digo que de forma razonable. Además, también está el factor tiempo que también da muchos datos, dato que si se tratase de algo importante, en muchas ocasiones, la sintomatología no permanece igual, sino que va a más.
Dices que con el dolor abdominal tuviste que insistir para que te detectaran aquello de lo que después te operaron. Dices que no tuviste otras preocupaciones especiales, excepto esta, y pienso que pudo haberte quedado el miedo, y el temor a que se te repita con esta sintomatología la situación.
Si se descarta sintomatología orgánica, estos síntomas pueden explicarse por ansiedad. No citas ningún síntoma realmente atípico; por supuesto que otra cosa sería pérdida de conocimiento con relajación de esfínteres, etc. Dices que te han diagnosticado de un cuadro de ansiedad y realmente hablas de síntomas en este sentido como agitación, temblores y sudores.
Dices: "Me siento inútil y no quiero que mi vida se reduzca a esto y no entiendo por que me pasa, siempre he sido muy fuerte y nunca depresiva". Me imagino que habrás tenido una personalidad fuerte y capaz, y quizá esta limitación, te ha afectado. Quizá te guste o estés acostumbrada a tener todo lo que te rodea aparentemente controlado y el que algo se te escape de las manos, te pone nerviosa.
Yo te diría, con respecto a tenerlo todo controlado, lo cual es un imposible, que hay que fomentar el querer controlar sólo lo que depende de uno, y aprender a "soltar", cualquier resultado, o aquello que no depende. Y esto sólo se puede lograr cuando uno ya no mira sólo por sus intereses, sino que tiene una actitud más generosa frente a la vida. Digamos que ya no es sentirse uno útil, o ser capaz, o poder hacer unas determinadas cosas, sino que lo que siempre estará presente, pase lo que pase, es poder hacer uno el mayor bien posible, por las personas, con nuestra vida. Y esto es lo que te recomiendo, por lo que te dejo abajo una dirección de actitudes saludables. Yo te diría que esto puede aliviar la ansiedad frente a lo inesperado e incontrolable, así como permite adaptarse de la mejor manera a cualquier limitación, ya que se le ve un sentido (la orientación de incluirlo en el camino del bien a los demás, y no verlo sólo como una molestia para uno). Creo que la enfermedad, así como cualquier limitación, enseñan mucho; entre otras cosas enseñan lo que es realmente importante en la vida. Por el contrario, cualquier tipo de riqueza, incluida la emocional, puede hacer pensar a la persona, engañosamente, que es autosuficiente, o que lo puede todo, cuando nada más lejos de la realidad.
Un saludo.
Ana Vázquez
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