¿Puedo correr?

A ver si lo he entendido bien: a fecha de hoy, ¿te han quitado un menisco completo o solo parte? También tienes un desgarro parcial del Ligamento Cruzado Anterior, pero no está roto del todo...
Bueno. En esta situación hay dos cuestiones a tener en cuenta:
-Inestabilidad: es muy importante valorar (mediante la maniobra de cajón anterior y los bostezos laterales) si la rodilla está aceptablemente sujeta, en cuyo caso puedes hacer deporte; o si por el contrario, el hueco dejado por el menisco y/o la laxitud del ligamento lesionado hacen que la rodilla baile. La consecuencia de esto sería que si pisas mal (hoyo, resbalón, etc), la rodilla se te podría lesionar más. En este caso, lo mejor es operarte, para solucionar la inestabilidad.
-Desgaste: La ausencia del menisco (especialmente si te lo quitaron entero), provoca que la rodilla no apoye bien (como una silla que está un poco coja). Esto a la larga te predispone a una artrosis precoz de rodilla. Por eso no conviene correr demasiado, ya que el impacto contra el suelo acelera ese desgaste de los cartílagos. Es mejor hacer natación.
En cualquier caso, es imprescindible hacer una exploración completa de la rodilla para poder dar una opinión bien fundamentada. Puedes consultar en www.fisio-sport.com, a ver si nuestra Clínica está cerca de ti. Si no, estoy seguro que en tu ciudad hay gente competente que te podrá atender.
Mientras tanto, puedes probar lo siguiente, que quizá te ayude a fortalecer y controlar mejor la rodilla:
-Siéntate en una silla, y apoya el pie en el suelo. Ahora, levanta la punta del pie (deja el talón apoyado), y sin mover la rodilla, gira sobre el talón, de forma que la punta del pie vaya hacia dentro y hacia fuera. Eso te servirá para desbloquear los meniscos y activar la irrigación interior de la rodilla.
-Ponte de pié en equilibrio sobre la pierna afectada. Flexiona ligeramente la rodilla. Mantente en equilibrio un rato (quizá al principio necesites tener delante una mesa o similar, por si pierdes el equilibrio). Cuando veas que mejoras y ya no te cuesta tanto esfuerzo mantener el equilibrio, prueba con los ojos cerrados, que es más difícil.
Otras formas de aumentar la dificultad son: ponerse de pié sobre una almohada, cambiar el grado de flexión de la rodilla, cambiar la posición del cuerpo y los brazos... o una combinación de varias. Hazlo 5 minutos cada día.
-Fortalece los músculos Isquiotibiales, situados detrás del muslo, que ayudan a la función estabilizadora del Ligamento Cruzado Anterior. Haz movimientos que impliquen la flexión de la rodilla, la extensión de cadera, o ambas cosas simultáneamente.