Enrojecer y sentir pánico ante una situación nueva

Le escribo porque a veces me encuentro en unas situaciones extrañas en mi vida que me pasan desde hace poco pero que van de mal en peor.
Le explico, a veces cuando estoy delante de una persona que no conozco; por ejemplo en el trabajo cuando me presentan a un nuevo colega, me entran como ataques de pánico, es decir; en seguida me pongo roja, el corazón me late muy rápido, se me hace un nudo en la garganta, incluso me falta la respiración y quiero escapar. A veces ni si quiera puedo mirar a esa persona a la cara. Ni le cuento cuando tengo reuniones con el jefe o con alguien importante, entonces es la catástrofe.
Otra situación es por ejemplo en mis cursos de idiomas, cuando el profesor me pregunta algo, sólo a mí, me entra una sensación de pánico total; enrojezco; no puedo casi ni hablar; noto el corazón en la garganta, me quedo sin saliva; se me hace como una visión túnel; no veo a nadie más y lo único que quiero es huir, a veces incluso me mareo. Es extraño porque yo también soy profesora de idiomas y comprendo como se sienten los estudiantes en esa situación pero no lo puedo remediar.
Incluso en las tiendas cuando necesito explicar algo (por ejemplo, estoy buscando algún producto) me pasa lo mismo, sobre todo si veo que el dependiente no lo ha entendido bien y necesito repetirlo; lo que hago normalmente es decir "da igual; no importa, ya lo encontraré yo" e irme.
En cuanto tengo que afrontar una situación nueva desconocida para mi, que no he planeado no sé que hacer; pero sólo me pasa cuando me relaciono con la gente. Con otras cosas, por ejemplo; afrontar un nuevo trabajo/reto, hacer deportes de riesgo o cosas "aventureras" no me pasa. Sobre todo si lo hago yo sola o con amigos o gente que ya conozco. En general no soy una persona tímida; al contrario, mis amistades dicen que soy muy abierta, sociable y con mucha energía.
Cuando estoy en un grupo me siento más segura; sé que toda la atención no estará puesta en mí y no me pasa tanto.
¿Qué cree que es? Son unas situaciones muy incomodas, sobre todo en el trabajo ya que cuando enrojezco (no solo es la cara es también el pecho y el cuello; son como ronchas rojas, así que a veces cuando llevo escotes o vestidos es incluso más evidente), sé que la gente lo ve y me pongo más roja todavía y parece que la cara me va a explotar.
Hace unos meses no me pasaba, yo antes era profesora de instituto y hacia muchos nervios a causa de los estudiantes y también delante de ellos me ponía roja, incluso un poco violeta (a veces les escuchaba decirlo) pero sólo me pasaba en la clase; ahora se ha extendido a mi vida privada. Cuando me enfado o estoy hablando de un tema un poco controvertido e intentando defenderlo me pasa igual: roja y grandes palpitaciones.
¿Qué puedo hacer para evitar estas situaciones? ¿Recomienda algún medicamento; remedio natural, etc?
Espero que pueda darme una respuesta; yo vivo en Francia y tengo miedo de ir al médico y no saber explicarlo bien; así que si pudiera darme alguna explicación la próxima vez que vaya podría ser más fácil para mi.

2 respuestas

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Ante todo debería descartar un posible problema médico, fisiológico. Si ahí no hay nada, podría tratarse de un trastorno de fobia social, que en definitiva es una etiqueta que tampoco resuelve mucho el problema. Incluso tengo mis dudas de que sea un caso de esta índole, puesto que describes muchas situaciones en las que no aparece la reacción de ansiedad.
No creo que tengas más remedio que o bien ponerte en manos de un psicólogo, o bien entrenarte en técnicas de autocontrol. La solución de las pastillas es la más cómoda pero presenta el peligro no sólo de los efectos secundarios sino también de la posible adicción. Tampoco te ayudan a entender el porque y el para que tienes este problema.
Si no puedes ir al psicólogo y tienes suficiente voluntad, la práctica constante de una técnica de autocontrol te ayudará. Por ej., el Entrenamiento Autógeno de Schultz, entre otras.
Si decides recibir asistencia psicológica, busca un psicólogo que te atienda en consulta (es lo mejor) o un psicólogo que te atienda en una consulta online (también funciona). En este último caso yo mismo podría intentar ayudarte. Tengo clientes que por medio de videoconferencias en Skype, reciben asistencia en lugares lejanos.
Un cordial saludo,
Josep M.
www.jmmorenoalavedra.com
Hola de nuevo y gracias por su rápida respuesta
lo del problema fisiológico también lo he barajado; de hecho un análisis de hormonas dijo que todo va bien aunque creo que repetiré el test dentro de poco otra vez.
Yo también estoy confusa con respecto algunas situaciones en las que no aparecen los síntomas y me pregunto si ese realmente una fobia social u otra cosa o simplemente algo físico ya que ciertas circunstancias me hacen palpitar el corazón fuertemente y provocan estas rojeces. O quizás es algo psicológico más profundo y mi cuerpo lo refleja con este síntoma.
No sé qué puede ser; estoy un poco cansada ya de esta situación y confusa.
Me gustaría saber como funcionan sus consultas por medio de Skype, precio; horarios; etc. y que tipo de ayuda me daría (que tipo de terapia)
Gracias de nuevo por su interés y reciba un cordial saludo. R.
Básicamente el tipo de terapia es el mismo que aplico en las sesiones presenciales, se trata de sesiones por videoconferencia junto con un conjunto de tareas a ejecutar por ti fuera de la sesión. Las tareas varían según el caso y su evolución, pero siempre implican aspectos de 1. autodescubrimiento, identificar las ideas, creencias y valores que puedan crear problemas, 2. evaluación de éstas y 3. cambio.
Esto es una definición muy general. Si te interesa mejor llámame (630485403 o al fijo 932379180) si estás en España, o escríbeme ([email protected]) para concertar una cita por Skype donde informarte con más detalle.
Saludos cordiales
Jose M.
www.jmmorenoalavedra.com
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Pues lo que tienes, es algo tan simple y tan complejo como un trastorno de ansiedad con sus correspondientes ataques de pánico.
La ansiedad es una emoción normal que tiene una función adaptativa en diferentes situaciones. Cualquier ser vivo dispone de ese mecanismo de vigilancia que asegura su supervivencia y la ansiedad cumple ese papel. Es lógico y deseable tener miedo cuando se avecina un peligro real para prevenir males mayores. Sin embargo, a veces, estos mecanismos de prevención no funcionan de forma adecuada y se produce una reacción de alarma ante estímulos inofensivos. Es entonces cuando surgen los temidos síntomas: sudoración, palpitaciones, temblores, sensación de ahogo o falta de aliento, sofocos o escalofríos, miedo a perder el control, sensación de atragantarse o, incluso, otros más alarmantes, como opresión o malestar en el pecho, inestabilidad o mareos, desrealización e incluso despersonalización. Naturalmente no tienen por qué darse todos los síntomas a la vez ¡Pobre de nosotros si así fuera!
Ante esta esta situación, hay dos posturas: la médica, que intenta actuar sobre los síntomas (normalmente suelen prescribir un ansiolítico asociado a un antidepresivo) y la psicológica, que mediante la terapia suele incidir en los mecanismos que provocan la situación.
En realidad, lo importante ante esta patología no es una curación más o menos rápida -que también lo es-, sino aprender a manejar los síntomas para poder llevar una vida normal. Ante todo, es muy importante la práctica de la relajación y la respiración abdominal o diafragmática. A partir de ahí, se llevan a cabo diferentes técnicas para un tratamiento cognitivo-conductual y el afrontamiento a las situaciones que provocan los síntomas. Naturalmente, hablo en este caso del tratamiento psicológico.
Espero haber aclarado algo tu situación y me tienes a tu disposición por si en algo te puedo ayudar.

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