Pues has hecho bien en contenerte en ese momento. Y ahora te recomiendo dos factores:
1. Conducta correcta, buena en sí misma; eso siempre. Y 2, el factor fundamental, buena intención hacia todos los implicados. No
Enfoques el tema pensando en tus intereses, sino que pensando en el bien de verdad de todos. Si uno piensa solo en sus
Particulares intereses, tampoco piensa en su propio bien, sino que atiende a intereses superficiales, que pueden ser o vanos o
Desordenados. A tu madre le harás mucho más bien con tu buen comportamiento de verdad, con tu respuesta auténticamente generosa,
Aunque quizá una respuesta mala pudiera alimentar ciertos intereses. No cabe duda que la buena respuesta obliga a uno a
Sobreponerse a los intereses vanos o desordenados, como en este caso podría ser el dejarte llevar por el rencor, el pensar que
Se espera de ti una respuesta agresiva, que podrías quedar de cobarde si no respondes de esa manera, etc. Piensa que la
Auténtica valentía es actuar bien de verdad; y el dejarse llevar por lo que digan los demás es debilidad.
Tienes que pensar en el bien de verdad de esa persona, y piensa que tu buen comportamiento (y no una posible paliza) es lo que
Puede brindarle una mejoría, dándole un ejemplo de ser capaz de anteponer el bien de verdad a los intereses superficiales y
Particulares. Si quieres honrar a tu madre, hónrala con un buen comportamiento, con una buena respuesta.
Piensa también que, como dices, tú estabas ebrio, con lo cual estabas colaborando en una situación de descontrol, que no a todo
El mundo afecta de igual manera. Mira tu parte y procura mejorarla. Esta situación no te cayó del cielo, porque tú ya estabas
Voluntariamente en algo que tenía sus muchos riesgos (piensa en si pensaste en el ejemplo que le podías dar a él y a otros, y lo que podrías generar con tu conducta). No temas ver tu parte, ya que viendo tu parte, mejorarás mucho más, y no te quedarás con una sensación de indefensión impropia del ser humano, pensando que estás a merced de lo que digan o hagan los demás, cuando no es así, ya que a ti siempre te influirá mucho más tu propio comportamiento que el de las demás personas humanas; los demás podrán alterar ciertas circunstancias de tu vida, pero en lo fundamental mandas tú más que los demás. Y tú eres el que decides cómo afrontas la vida y los acontecimientos. Y si uno pretende disculparse de su mal comportamiento, entonces todo el mundo podría hacerlo, ya que sin duda él también podría decir que sufrió algunos acontecimientos que le hicieron reaccionar como lo hizo, y así nadie sería responsable de nada.
Cada uno tiene su responsabilidad. Si uno responde mal ante un mal acontecimiento, ya esá actuando mal, y Dios sabrá
Quién tiene más responsabilidad, si el que quizá tuvo una manifestación externa mala, o el que respondió mal ya sea externamente
O bien con indiferencia hacia su semejante, y falta de amor, como si uno ve a alguien en un precipicio y lo deja. Hay
Precipicios morales, y tienes que pensar que tu buena respuesta puede ser muy influyente en la vida de ese chico. Tú tienes que
Tener claro que a ti no te corresponde decidir directamente cómo actúan los demás, ni juzgarlos en su concreta responsabilidad,
Pero sí tienes que saber que siempre quieres actuar y responder bien de verdad, aportando el mayor bien posible, todo según Dios
Y estando en gracia de Dios; y esto las veces que hagan falta, y sin cansarte, con la gracia de Dios.