¿Tendrá alguna patología mi novio?
Hace 4.5 meses comencé una relación con alguien que conocí en plena ola de despecho por una relación tóxica de 2 años. Con esta nueva persona fueron fuegos artificiales y mucha afinidad mental, psicológica y de intereses. Pero conforme fue avanzando el tiempo observe que tiene actitudes extrañas. Tiene 30 años y es muy nerd. Cosa que me gusta. Pero una cosa es ser nerd, otra cosa es tener conductas extrañas. Mucha impulsividad. Tiene un trabajo y salario normal pero adora las cosas caras, no se priva de absolutamente nada, lo vive todo. Es un poco envidioso del éxito de sus amigos y vidas (el lamentablemente desarrolló una enfermedad renal muy joven y ha sufrido mucho). Vive refugiado en vídeo juegos, es muy sociable. Llegué a pensar si es asperger, pero es que yo veo que si entiende chistes. Es muy cómico. Pero NO es asertivo para nada. Es un poco robótico a veces aunque, insisto, es muy emocional y cariñoso. Pero es desubicado en situaciones sociales e incluso nosotros como pareja. Jamás había tenido novia y está muy al pendiente cómo de comprometerme con el. Presentarme a su familia. ¿Estoy un poco a brumada porque por más que le guste una chica los chicos se lo piensan no? Yo no quiero dejarle porque le amo y quiero. Pero adora que le regalen juguetes con 30 años! Quería un rompecabezas de estas de piezas o un lego armable. Me desespera y me asusta la posibilidad que en efecto me esté acostando con un niño. Pero, el le le gusta la política, hablamos de filosofía y demás porque tenemos carreras similares. Pero sus defectos me están haciendo dudar de la relación y sobre todo, me sorprende, que un hombre quiera ir tan rápido. Entiendo que le gusto pero... ¿no podría ser por interés? Yo he sufrido mucho y me siento bien cuando estoy con el. Es muy dulce. Pero Siento que debe tener alguna patología por su sufrimiento de Salud en el pasado, su condición de que toma pastillas para estar vivo y no se. En vez de ser más generoso, menos exigente ha sido todo lo contrario. Es como si fuera un poco narcisista y cree que lo merece todo y más por su condición. Lo cual me ha decepcionado y no quiero aceptarlo
2 Respuestas
Simplemente dile que tú buscas una relación seria y para eso necesitáis conoceros bien. El tiempo te dirá si quieres a ese chico lo suficiente para aceptar sus rarezas o no.
Tu no eres su Psicologa, el es como es, no creas que va a cambiar etc.
Por eso necesitas tiempo para saber si le aceptas como es o no. El también necesita tiempo para ver si te acepta como eres, porque tú no tambien eres como eres y puedes adaptarte por un tiempo a sus gustos, pero no eternamente.
El tiempo te dirá si es o no el hombre de tu vida
Yo te recomendaría hacer las cosas bien, de cara a aclarar la situación, poder conocerlo, al tiempo que lo ayudas a crecer como persona (al tiempo que, por supuesto, también te ayudas a ti), pudiendo ver con mucha más claridad la posibilidad de contraer un matrimonio como Dios manda, etc.
Y hacer las cosas bien no es dejarse llevar por intereses vanos o desordenados, ni incluye hacer cosas malas en sí. Si tú por ejemplo te dejas llevar por complacerlo, podrás pasar toda la vida y no lo conocerás en muchos aspectos, además de que tampoco lo ayudarás.
Te recomiendo amar de verdad, pensar en el bien de verdad, lo cual siempre exige esfuerzo y renuncias, pero con lo cual siempre, siempre, saldrás ganando. En este sentido, lo primero que te recomiendo es suspender las relaciones propias de un matrimonio; este solo detalle puede sacarte de todas las dudas que planteas, pero con esto ya te estás haciendo bien, y dando un buen ejemplo. Acude al confesionario, si estás bautizada como me imagino, y recupera la gracia de Dios, arrepintiéndote de haber desobedecido los Mandamientos de Dios, y no haberte guiado por amor. Y una vez recuperada la gracia de Dios esfuérzate en hacer todo el bien que puedas; no vivas para ti misma. Haciendo el bien de verdad, realmente ganas en lo fundamental; en cambio viviendo uno para sí mismo, se hace mucho daño en lo fundamental, aunque alimente muchos intereses vanos o desordenados. Ayúdate por supuesto de la frecuencia de los Sacramentos, y de la oración.
Solo es una cuestión de tomar una decisión, ya que sin duda Dios te ayudaría. Piensa en el bien de verdad de él, y que esto esté por encima de intereses vanos o desordenados.