El suelo pélvico es el conjunto de músculos, ligamentos y fascias que conforman la base de la pelvis cerrando la parte más inferior de la cavidad abdominal tanto en hombres como en mujeres.
Su buen estado y funcionamiento es imprescindible para preservar sus cuatro funciones principales; sostén de las vísceras pélvicas, continencia urinaria y fecal, función sexual y función reproductiva.
El hecho de que el embarazo pueda afectar al suelo pélvico ha acentuado la concienciación de las mujeres respecto a esta zona de su cuerpo. Sin embargo, su patología, no se circunscribe a la maternidad. Además, afecta tanto a mujeres como a hombres.
¿Qué molestias/complicaciones qué merman considerable la calidad de vida se asocian al suelo pélvico y la gente no lo sabe?
Incontinencia, dolor lumbar y en la zona de la pelvis, prolapsos…son algunas de las complicaciones que puede presentar el suelo pélvico y que, pese a no comprometer seriamente la salud, suponen un menoscabo importante en la autoestima, autonomía y calidad de vida de quien lo padece.
Esas situaciones, ¿pueden acabar en resignación?
Efectivamente. Al final, muchas personas acaban por renunciar a pequeñas cosas; pero esas renuncias pueden tener un coste social y personal importante.
Por ejemplo, si tengo pequeñas pérdidas de orina que me obligan a utilizar compresas puede que no pueda utilizar la ropa que me gusta. O si salir de copas con amigos supone el ir al servicio cada pocos minutos, finalmente iré reduciendo las salidas. Si tengo relaciones sexuales con dolor, acabaré espaciándolas, con el riesgo que ello supone A la salud sexual de las mujeres.
¿A partir de qué edad habría que empezar a hacer prevención de suelo pélvico y cómo podemos hacerlo?
Cuanto antes, por supuesto. Me gustaría destacar en este sentido la importancia de una correcta educación sexual. En la medida en la que, tanto hombres como mujeres, conozcamos nuestro cuerpo, sus partes, la función que cumple cada una de ellas, las señales de que algo no funciona como debiera…estaremos cuidando nuestro suelo pélvico.
Una vez deteriorada la salud del suelo pélvico, ¿qué podemos hacer para devolverle su buena condición?
Ante la sospecha de que nuestro suelo pélvico puede estar dañado, lo más recomendable es la valoración por parte del ginecólogo. Tras esa primera valoración, un fisioterapeuta especializado en suelo pélvico debe analizar el caso de cada paciente. Analizar sus rutinas, saber en qué trabaja, que tipo de vida lleva…y a partir de ahí desglosar una serie de ejercicios y tratamiento para el suelo pélvico, además de tutelar al paciente en la forma correcta de realizarlos.
¿Qué valor añadido/sinergias se dan al trabajar el suelo pélvico en un centro especializado, con una unidad multidisciplinar de fisioterapia y de cuidado en general de la patología musculoesquelética?
Sin duda el trabajo en equipo, consensuado por distintos profesionales, se traduce beneficios directos para el paciente. Que tendrá un diagnóstico más exhaustivo y un tratamiento multidisciplinar que dará solución, no ya al suelo pélvico, también a zonas cercanas que puedan verse comprometidas.
Por otra parte, la dotación de tecnología de última generación-ecógrafos, ondas de choque, diastemia, que se suman a unas instalaciones especialmente ambiciosas -piscina de hidroterapia, una planta exclusivamente dedicada a fisioterapia y otra para readaptación, etc.- supone un extra en la atención asistencial de los pacientes.
3 señales que nos indican que deberíamos revisar nuestro suelo pélvico
Las tres señales de alerta por las que deberías valorar tu suelo pélvico son:
La primera serían las incontinencias urinarias aquellos escapes de orina que pasan porque hay un esfuerzo o porque tengo que ir muy rápido a hacer pis y no llego
La segunda puede ser una sensación de peso o depresión o de bulto a nivel vaginal como si tuvieses un tampón una copa o una pelota dentro de tu espacio vaginal.
La tercera y no por ello menos importante el dolor antes durante y después de las relaciones sexuales si te sientes identificada con alguno de estos síntomas y crees que es importante para tu día a día no dejes de consultar a un especialista.
Ángela Monfort especialista en suelo pélvico en el equipo de fisioterapia de IMSKE.