El día 24 de diciembre, abrí un frasco de ajo en aceite

El día 24 de diciembre, abrí un frasco de ajo en aceite que tenía
guardado en la despensa, al abrirlo la tapa se partió ( era de plástico
y el frasco de cristal) prácticamente explotó, y la tapa salidio
disparada, evidentemente tenía una especie de gas que se formó ahí
dentro, en ese momento estas cosas no llamaron mi atención y me comí
los ajos, al día siguiente le conté a un amigo lo sucedido y me dijo
que acudiera al médico al primer síntoma de mareo, nauseas, o dolor de
garganta porque tal vez podría yo contraer botulismo, asustada me puse
a investigar algo en la web, y leí con asombro lo peligroso que es
consumir los ajos en aceite guardados a temperatura ambiente por el ph
del ajo y porque el aceite proporciona ausencia de oxigeno lo cual hace
que crezca esa bacteria, gracias al cielo no me ocurrió nada, pero con
todo lo que leí en la web mi pregunta es cómo pude librarme, sí los
ajos llevababn ya dos meses en la despensa y sin refrigeración, me
interesó mucho el tema pero de química no entiendo nada, pero estoy
intrigada de la suerte que corrí, ojala alguien me pueda explicar cómo
mi organismo resistió esa toxina porque de que había gas dentro lo
había. Gracias por sus respuestas

1 Respuesta

Respuesta
Estimada Helga,
Yo diría que, casi con seguridad, el Clostridium botulinum no se encontraba en esos ajos. La fermentación y la producción de gas fueron producidas o por otras bacterias, o por el mismo ajo.
De todas formas deberías evitar la ingesta de ese tipo de conservas. Has tenido suerte.

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