Ya empezamos con las especulaciones, rizando el rizo, buscando eventuales posibilidades de matizaciones que en nada modifican la realidad y solo sirven para pretender una justificación especulativa y accidental de si fue una gota, más de una, o menos, en la vagina, en la vulva o alrededor de la vulva. La cuestión es clara y definitoria: ¿Hubo, o no hubo, relación sexual de riesgo?. Esa es la cuestión que se ha de conocer o bien esta otra: ¿Usa, o uso, medios anticonceptivos, o no los empleó?. Si no usa anticonceptivos, no uso preservativos adecuadamente, hubo penetración breve, larga, o intermedia, hubo eyaculación, dentro fuera o en los alrededores, con bragas, sin bragas, sobre el pelo, sin pelo, limpiándose inmediatamente, limpiándose demoradamente, o sin limpiarse, todo eso así o de otra manera puede ser causa de embarazo. El liquido lubricante, llámese así, o llámele preseminal, seminal, prostático, preeyaculatorio, o «6en1», «3en1», aceite de máquina de coser, o simplemente «eyaculado», tiene capacidad de producir un preñe. El líquido seminal que «roza» la vagina por un fenómeno físico de desplazamiento de fluidos en grietas o láminas entre paredes se introduce en vagina y es capaz de engendrar.