¿Es verdad que existe el punto «G» femenino?. Las opiniones están encontradas, unos dicen que, sí y otros dicen que, no. Según parece, en algunos casos se han hallado las estructuras anatómicas y en otros casos parece que no se encuentran. Quienes creen haberlo hallado, estimulándolo, perciben sensaciones muy agradables y quienes no lo encuentran se siente defraudados. En definitiva, en mi opinión el punto «G» está en el «gerebro» y es más una cuestión de tipo emotivo, afectivo y sensual que física, pues en tal caso podríamos hablar de individuos completos, quienes por las circunstancias que sean lo localizan, e imperfectos, o incompletos quienes no lo encuentran. Sin embargo con punto «G», o sin él, si la afectividad, la ternura y la entrega no está presente la relación sexual queda carente de emotividad. La sexualidad, no es una serie de localizaciones que pulsándolas se logra una sensación, no es un piano, es un conjunto de posibilidades que armónicamente estimuladas, desencadena un conjunto de sensaciones que culmina con el orgasmo; yo, al manipular el teclado logro escribirle una respuesta; un mono tocando el teclado, no logrará escribir nada inteligible, sin embargo, algo escribirá.