La rotura del preservativo, si bien puede pasar desapercibida durante la relación, es, sin embargo, muy evidente, al término de ésta, cuando se procede a retirar el preservativo.
La rotura generalmente puede ser de dos formas:
- Rotura por la punta, que deja al descubierto el glande y el semen se sale del preservativo.
- Rotura lateral a lo largo del preservativo.
Cuando se usan de forma correcta, los preservativos ofrecen una protección total frentea los embarazos no deseados, la transmisión del VIH y muchas ITS. El empleo correcto supone también utilizar un lubricante adecuado, en caso necesario, para evitar desgarros y comprobar que el condón está bien colocado Cuando los científicos informan de que los preservativos solo tienen una eficacia del 85 al 95%, se debe a que las personas que utilizan condones no lo hacen en todas las ocasiones o que lo utilizan mal.
Como en cualquier otro tema de seguridad, higiene y medicina, no se debe hablar del 100% o del 0%.
Pero sí se puede decir que bien utilizado, el preservativo es hoy por hoy, el método más eficaz, a excepción, claro está de la abstención.
Lo que el usuario suele hacer mal
- Desenrolla el condón antes de ponérselo
- Pone el condón cuando ya se ha empezado la penetración.
- Usa el mismo condón dos veces
- Utiliza un condón al revés
- Utilizar dos condones a la vez (rotura más probable por la fricción entre ambos)
- Utiliza lubricantes basados en aceite
- Abre el sobre del condón con tijeras, dientes o uñas afiladas
Muchos condones contienen lubricantes, pero algunas personas prefieren poner más lubricante. Los condones más utilizados son de látex, este material tiene una reacción fuerte con lubricantes hechos de aceite, pueden romper en pocos minutos. Por tanto, si se requiere utilizar lubricantes con el condón, hay que utilizar lubricantes hechos a base de agua.