Entiendo muy bien que te canse, pero siempre intenta pensar que iniciar una "guerra" con tus padres por cualquier motivo, será una pérdida instantánea para ti, porque por lo general (y puede que me equivoca), los padres al ser precisamente padres no reconocerán un error que llevará a darles la razón a un hijo.
El mundo de los padres es complicado, imagínate, nadie les enseña a ser padres y tienen que hacer lo que ellos crean mejor para ti. Es un trabajo intenso. A eso, súmale intentar entender a una generación totalmente distinta a lo que ellos fueron.
No digo que debas sólo obedecerles, para nada, los padres también cometen errores. Tu necesitas ser comprendida como todos los hijos, pero tiene que ser al ritmo de ellos, porque si lo intentas hacer a tu ritmo, quizás ellos no logren captar lo que les intentes decir o sea algo demasiado rápido y como no lo entiendan, podrían negarse malinterpretando las cosas.
¿Mi consejo?, si quieres que ellos se den cuenta que eres una mujer responsable y que dejaste de ser niña, debes construir un camino que te respalde. Toma decisiones en otras cosas y asume sus consecuencias, sean buenas o malas. Hazte cargo de algunas labores de la casa (en caso de que no lo hagas), intenta demostrarles con hechos y no con palabras que ellos pueden confiar en ti.
Aún cuando eso ya lo hayas hecho, sigue haciéndolo más aún y comprende que aún cuando ellos confíen al 1000% en ti, siempre habrá una desconfianza contra el mundo y a veces ellos solo intentan protegerte de él.
Habla el tema. Diles qué es lo que piensas y qué decisión te gustaría tomar. Sé sincera, no te alteres en ningún momento y pídeles que te escuchen nuevamente. Una conversación de adultos, sentados en una mesa quizás, después de comer. Si ellos ven un cambio en tu actitud hacia algo más maduro (aunque ya lo seas), podrían darte permiso. Si no, funciona nada de lo anterior, tienes 2 caminos: Arrancarte de tu casa, cosa que no te recomiendo, y hacerles caso, y aguantar hasta que puedas demostrarles que puedes tomar decisiones como el adulto que eres.
Es un camino largo, pero tienes las opciones disponibles para ti. Tu decisión, ahora y siempre, debe basarse en lo que te traiga menos carga negativa a tu vida. Pon en una balanza todo lo que pierdes en un lado y todo lo que ganas en el otro con cada decisión que quieras tomar, y te darás cuenta con qué consecuencias quieres lidiar y con qué cargas asumes llevar.
Perdón por extenderme tanto.
Cualquier cosa que necesites, ya sabes dónde encontrarme.
Un abrazo!