¿Tengo depresión o es algo común y corriente?

A mi modo de ver no tienes depresión ni nada por el estilo, lo que describes es típico de la adolescencia, tu cuerpo y tu mente están en un periodo de intenso cambio, y todo el está reestructurandose.

No te pasa nada, o te pasa todo, según como se mire, la tristeza repentina, el deseo de dejarse llevar por los sueños, la apatía, el retraimiento... todo es propio de esa edad y por ahí hemos pasado todos los adultos.

Lo que pasa es que pese a todo eso la vida sigue y de lo que hagas ahora dependerá como te irá cuando seas mayor, porque es también una etapa de formación intensa en los estudios, de aprender a relacionarse con los demás... etc. y con todo el esfuerzo que ello te supone, tienes que seguir adelante.

No es que este mal tu tendencia a la ensoñación, a aislarte, ni que seas una vaga, ni que tengas una enfermedad. Simplemente tienes que superar esos inconvenientes y saber poner límite a esas tendencias, no dejarte llevar por ellas y estar tranquila porque con todo es una etapa maravillosa.

Sin querer ser cursi, te pasa como cuando los gusanos de seda se encuentran encerrados en un capullo, sin saber que esa es una etapa importante porque de ahí van a salir convertidos en mariposa.

Adelante, se feliz.

Es tal como te dice Laura, no tienes por qué preocuparte tanto ni pensar que tienes anhedonia, noooo. La adolescencia es un tiempo en el que experimentas importantes cambios: físicos, emocionales e incluso sociales. En cierto sentido, entrar en la adolescencia es emocionante. Al fin y al cabo, significa que estás en vías de convertirte en una persona adulta. Por otro lado, durante esta fase de la vida empiezan a surgir nuevos sentimientos, y algunos pueden desconcertarte, hasta atemorizarte.

Pero no tienes por qué temer la adolescencia. Aunque es cierto que conlleva cierto grado de angustia, también proporciona una maravillosa oportunidad de experimentar una agradable transición hacia la edad adulta. La mayoría de los adolescentes pasan por períodos de soledad, y lo mismo les sucede a muchos adultos. Lo que debes tener presente es que tales sentimientos pueden desaparecer con el tiempo. Recuerda que, como estás en la adolescencia, prácticamente todo te está cambiando. Tu opinión de la vida, de los demás y hasta de ti mismo varía sin cesar. A veces, hasta el rostro que ves en el espejo puede parecerte el de una persona totalmente desconocida.

Una de las mejores maneras de contrarrestar la soledad es interesándote por los demás, lo que tal vez signifique que debas esforzarte por conocer a personas que no forman parte de tu círculo de amistades. ¿Sabes de algunas personas mayores que agradecerían una visita? ¿Pudieras ayudarlas con algunas tareas, especialmente si lo necesitan? La Biblia anima a todos —jóvenes y adultos— a ‘ensancharse’ en su cariño (2 Corintios 6:11-13). Hacerlo puede abrirte magníficas oportunidades.

En principio si parece una depresión, pero lo que hay que intentar es salir, ceo que tu más tienes dado tu edad una crisis existencial, pero de todas formas no es una depresión en principi cronificada, o grave, pero si iría a el psiquiatra, aunque te mande antidepresivos, eres tu la que tiene que salir, creo de todas formas que por esta etapa hemos pasado muchas personas.