Puede tratarse de una bola de sebo. En muchos casos son asintomáticos y no es necesaria la intervención; sólo hay que observarlos cada cierto tiempo para ver cómo evolucionan, teniendo en cuenta que estos quistes de sebo no son malos. A veces cambian o disminuyen su tamaño, pero al ser glándulas encapsulados con el tiempo vuelven a crecer.
También podría tratarse de Lipomas.
Los lipomas aparecen en los tejidos celulares subcutáneos y a veces es difícil diferenciarlos de los quistes epidérmicos. Estas bolas de grasa suelen ser de mayor tamaño y son poco frecuentes en la zona retroauricular, aunque es cierto que pueden salir en cualquier lugar en el que haya tejido graso. Los lipomas son una tumoración benigna de tejido graso que forma parte de la piel. Las principales características son que no tienen el contorno bien definido y presentan un tacto más blando. Su tratamiento también es quirúrgico.
También podría tratarse de Adenopatías.
Los bultos detrás de la oreja también pueden ser ganglios que estén inflamados. Cuando esto ocurre reciben el nombre de adenopatías. Presentan características reconocibles:
Al tacto son elásticas.
Se movilizan fácilmente con los dedos.
No están adheridas a planos profundos.
Son de pequeño tamaño, no rebasan por lo general el centímetro.
Pueden ser dolorosas.
Las adenopatías no suelen aparecer aisladas. Cuando el bulto está relacionado con la cadena ganglionar es frecuente que esté acompañado por otros iguales en la zona. Estos ganglios se pueden inflamar por una infección antigua que el paciente haya tenido en la infancia, o en algún otro momento de la vida, provocando que se hayan quedado hipertróficos.
También podría tratarse de Mastoiditis
Detrás de la oreja no solo está la piel, también se encuentra el hueso mastoideo. Un bulto tras la oreja puede estar relacionado con la inflamación de este hueso, sobre todo en los niños, lo que produce una mastoiditis. Esta afección provoca un cuadro inflamatorio, con malestar general, molestia en el oído, fiebre, secreciones, cefaleas y enrojecimiento del oído.
La mastoiditis puede estar causada por múltiples causas: infecciosas, virales, traumáticas. La más común es la infección del oído medio, que requiere un tratamiento antibiótico para su eliminación.
Salu2