Es una reacción emocional derivada de los sentimientos o pensamientos que te produce el tema. A lo mejor te gusta dar sensación de control, pero hay algo que escapa a ese control por afectarte en lo más sensible.
No sé si te molesta por la imagen que pudieras proyectar con eso; yo te diría que depures tu objetivo, no poniéndote tú, meramente, en el fin de tus actos, sino que piensa en lo que tú puedes aportar de bueno de verdad, lo cual será mucho mejor también para ti, aunque esto implique renuncias, incluso en lo que respecta a tu imagen personal.
Las emociones son algo involuntario, que no las puedes cambiar con tu mera voluntad, pero claro que en su origen pueden intervenir actos voluntarios, así como ya depende de tu voluntad cómo las afrontes. Yo te recomendaría comenzar por mejorar lo voluntario, lo que depende de ti, y, por tanto, está en tu mano el mejorarlo, mejorando, como te decía, la forma de afrontar tanto la vida en general, como las distintas situaciones, siempre con conducta correcta, y pensando en el bien de verdad de todos los intervinientes, anteponiendo esto a intereses vanos o desordenados; por supuesto que con la gracia de Dios. Esto también ayudará a que no quieras controlar lo que ya no depende directamente de ti (aunque pienses en mejorarlo indirectamente, en lo que sea razonable, si eso está dentro de un recto enfoque).