Pues, ni más, ni menos, que cortarle el prepucio, que es la piel que recubre y protege el glande. Esta practica, sólo está justificada en los casos en que hay una patología denominada fimosis, que es la imposibilidad de que el glande emerja del prepucio, por excesiva longitud del prepucio, o estrechez del orificio. No es necesario corregirlo de bebé, se puede esperar hasta los 10-12 años, pues frecuentemente, fimosis en recién nacidos el desarrollo lo corrige espontáneamente. Es una practica de tipo religioso: judíos, musulmanes, que no se corresponde con ninguna necesidad fisiológica, por lo que si puede debe proteger a su hijo de semejante barbaridad, que no mata, pero practicada sistemáticamente, sí, causa problemas a muchos niños por estar mal hecha o por tener una sensibilidad alterada en un órgano, el pene, que naturalmente está protegido, y si lo está, por algo será.