Se ha muerto mi perro y lo estoy pasando muy mal
Buenos días y muchas gracias por contestar a mi pregunta.Lo voy a intentar contar lo mejor posible.
Tengo 37 añosEstoy casada y con dos hijos. Desde hace algún tiempo no estoy bien debido a muchos problemas que me han marcado mi vida y siempre he sido la fuerte y con una sonrisa, tirando para adelante pero ya no puedo más. Entre mis padres, mi marido y un hijo de 18 años me derumbé. Solo tengo ganas de llorar todo el día. Fui al médico y me mandó una medicación. No tenía ganas de vivir, aunque suene fuerte solo vivía por los cachorros que había tenido mi perra y que me necesitaban de verdad, sobre todo uno que nació enfermo pero después de mucho parecía que salía hacia adelante. Le daba de comer, estaba todo el día conmigo ya que no lo podía dejar solo.Era especial, tenía unas ganas de luchar por vivir el cachorro que nadie se lo creía. Todo el mundo pensaba que iba a morir porque se axfisiaba, incluso más de una vez entrar al veterinario y ellos pensar que ya estaba y a los cinco minutos estar perfecto.
Con sus cuidados iba saliendo. El jueves se puso malo y lo llevé al veterinario. Le pusieron una medicación y me dijeron que yo si veía que empeoraba le diera más valium que sería un tipo de ataque unido a sus problemas respiratorios. Pero el perro no mejoró, seguía axfisiandose y yo pensé que había sido por en valium y los corticoides y no le puse más. La noche fue horrorosa. La agonía que sufrió el pobre animal no se la dedeo a nadie y yo equvicadamente no le dí el valium que a lo mejor le hubiese mejorado. El perro murió en mins brazos a las 8. Desde entonces no puedo dejar de llorar. Na die me entiende pero es que llegó a mi vida cuando más lo necesitaba, era un luchador, se aferraba a vivir cuando yo no tenía ganas parece que era la parte que me ayudaba a seguir. Ahora siento que le fallé, que le maté. Me acuerdo mucho de él de cuando jugaba, de cuando yo estaba mal y me lamía y solo tenía casi tres meses. Sé que es poco tiempo pero era especial de verdad. Nadie me entiende, sé que solo era un perro pero me dio más que mucha gente, le importaba yo.Me siento muy mal. Como yo tengo otros gatos y la perra mi marido dijo que ese iba a ser suyo, lo quería mucho y le maté a su perro.
Todo el mundo me dice que el perro estaba mal, que esto iba a pasar pero yo sé que no era así, que ya se dominaba sus ataques de no poder respirar sin medicación y que aún siendo más débil iba a salir, sus ojos me lo decían pero dejé que muriera y encima con un horrible sufrimiento, me equivoqué. Era un luchador.
¿Por favor que puedo hacer para dejar de sentirme mal? Muchas gracias por responderme y espero decir dentro de poco que no lloro y no me duele acordarme de mi Yuuky
Tengo 37 añosEstoy casada y con dos hijos. Desde hace algún tiempo no estoy bien debido a muchos problemas que me han marcado mi vida y siempre he sido la fuerte y con una sonrisa, tirando para adelante pero ya no puedo más. Entre mis padres, mi marido y un hijo de 18 años me derumbé. Solo tengo ganas de llorar todo el día. Fui al médico y me mandó una medicación. No tenía ganas de vivir, aunque suene fuerte solo vivía por los cachorros que había tenido mi perra y que me necesitaban de verdad, sobre todo uno que nació enfermo pero después de mucho parecía que salía hacia adelante. Le daba de comer, estaba todo el día conmigo ya que no lo podía dejar solo.Era especial, tenía unas ganas de luchar por vivir el cachorro que nadie se lo creía. Todo el mundo pensaba que iba a morir porque se axfisiaba, incluso más de una vez entrar al veterinario y ellos pensar que ya estaba y a los cinco minutos estar perfecto.
Con sus cuidados iba saliendo. El jueves se puso malo y lo llevé al veterinario. Le pusieron una medicación y me dijeron que yo si veía que empeoraba le diera más valium que sería un tipo de ataque unido a sus problemas respiratorios. Pero el perro no mejoró, seguía axfisiandose y yo pensé que había sido por en valium y los corticoides y no le puse más. La noche fue horrorosa. La agonía que sufrió el pobre animal no se la dedeo a nadie y yo equvicadamente no le dí el valium que a lo mejor le hubiese mejorado. El perro murió en mins brazos a las 8. Desde entonces no puedo dejar de llorar. Na die me entiende pero es que llegó a mi vida cuando más lo necesitaba, era un luchador, se aferraba a vivir cuando yo no tenía ganas parece que era la parte que me ayudaba a seguir. Ahora siento que le fallé, que le maté. Me acuerdo mucho de él de cuando jugaba, de cuando yo estaba mal y me lamía y solo tenía casi tres meses. Sé que es poco tiempo pero era especial de verdad. Nadie me entiende, sé que solo era un perro pero me dio más que mucha gente, le importaba yo.Me siento muy mal. Como yo tengo otros gatos y la perra mi marido dijo que ese iba a ser suyo, lo quería mucho y le maté a su perro.
Todo el mundo me dice que el perro estaba mal, que esto iba a pasar pero yo sé que no era así, que ya se dominaba sus ataques de no poder respirar sin medicación y que aún siendo más débil iba a salir, sus ojos me lo decían pero dejé que muriera y encima con un horrible sufrimiento, me equivoqué. Era un luchador.
¿Por favor que puedo hacer para dejar de sentirme mal? Muchas gracias por responderme y espero decir dentro de poco que no lloro y no me duele acordarme de mi Yuuky
1 Respuesta
Respuesta de Diana Ohana
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MVeo que eres nueva en todo expertos, antes de contestarte te quiero decir, mientras la pregunta esté abierta podrás comentarme algo más, o contestar a mis interrogantes y de nuevo yo volverte a contestar pero si cierras y puntúas la pregunta no tendré como comunicarme contigo a menos de que me vuelvas a preguntar. Ira, de alguna manera, te identificaste con el perro, fíjate en tus palabras al comienzo del diálogo, que escribiste, tu vida se derrumbó y lo único que le daba sentido a todo era el cuidado que le dabas a tus perros.
Quizás todo ese sufrimiento lo asocias con todo lo que te ha pasado y que sientes que te derrumbaste entre tus problemas con tu hijo, tu marido, y tus padres.
Por ello de manera inconsciente no le diste el valium a tu perro.
Errar es humano, tu identificas su lucha con la tuya propia, y con esto es como si todo se hubiese derrumbado de nuevo.
Es importante que puedas llegar a trabajar lo que te pasa en tu vida, luchar por aquello que tienes empezando por ti misma
Necesitas alguien con quien desahogarte, que te oriente, que te de una mano y una orientación profesional.
Que te ayude a encontrar los recursos que están dentro de ti, para que puedas seguir adelante con tu vida, contigo misma, con tus cosas, con tu familia, tus padres, tu marido y tus hijos.
Tienes 37 años, un futuro por delante y una familia que te quiere y que te necesita.
A veces nos pasan cosas en la vida, pero los obstáculos en ella están para ser vencidos no para dejarse vencer por ellos
Yo creo que lo que te pasa realmente amerita una ayuda profesional y es más que el hecho de hacer una pregunta.
Preguntar es un primer paso, positivo como tal, por que nos muestra que somos conscientes de que tenemos un problema y que lo debemos solucionar, es como un campanazo, una señal de alerta, que ni siquiera todos perciben, pero la solución no está en ello, sino en trabajar por la consecución de los resultados que queremos, y para ello a veces se hace necesario la intervención de un profesional, que nos pueda ayudar en nuestras diferencias y darnos herramientas para que las cosas funcionen mejor y a otro nivel
Es un proceso que requiere cierta madurez personal y entender que no siempre podemos solos, es como cuando tu carro no está bien, vas al mecánico, no se te ocurriría meterle mano solo y bajar el motor, pero a veces para las cosas que tienen un nivel emocional y con son importantes en nuestra vida, como la relación de pareja o la educación de nuestros hijos, sentimos que las cosas son diferentes, nos cuesta pensar que podamos necesitar la ayuda, y aún más recibirla.
Poder aceptarlo, y recurrir a un profesional en el momento justo y apropiado, puede ser la diferencia entre que las cosas cambien o se deterioren hasta el punto en el que ya no hay nada para hacer
Quizás todo ese sufrimiento lo asocias con todo lo que te ha pasado y que sientes que te derrumbaste entre tus problemas con tu hijo, tu marido, y tus padres.
Por ello de manera inconsciente no le diste el valium a tu perro.
Errar es humano, tu identificas su lucha con la tuya propia, y con esto es como si todo se hubiese derrumbado de nuevo.
Es importante que puedas llegar a trabajar lo que te pasa en tu vida, luchar por aquello que tienes empezando por ti misma
Necesitas alguien con quien desahogarte, que te oriente, que te de una mano y una orientación profesional.
Que te ayude a encontrar los recursos que están dentro de ti, para que puedas seguir adelante con tu vida, contigo misma, con tus cosas, con tu familia, tus padres, tu marido y tus hijos.
Tienes 37 años, un futuro por delante y una familia que te quiere y que te necesita.
A veces nos pasan cosas en la vida, pero los obstáculos en ella están para ser vencidos no para dejarse vencer por ellos
Yo creo que lo que te pasa realmente amerita una ayuda profesional y es más que el hecho de hacer una pregunta.
Preguntar es un primer paso, positivo como tal, por que nos muestra que somos conscientes de que tenemos un problema y que lo debemos solucionar, es como un campanazo, una señal de alerta, que ni siquiera todos perciben, pero la solución no está en ello, sino en trabajar por la consecución de los resultados que queremos, y para ello a veces se hace necesario la intervención de un profesional, que nos pueda ayudar en nuestras diferencias y darnos herramientas para que las cosas funcionen mejor y a otro nivel
Es un proceso que requiere cierta madurez personal y entender que no siempre podemos solos, es como cuando tu carro no está bien, vas al mecánico, no se te ocurriría meterle mano solo y bajar el motor, pero a veces para las cosas que tienen un nivel emocional y con son importantes en nuestra vida, como la relación de pareja o la educación de nuestros hijos, sentimos que las cosas son diferentes, nos cuesta pensar que podamos necesitar la ayuda, y aún más recibirla.
Poder aceptarlo, y recurrir a un profesional en el momento justo y apropiado, puede ser la diferencia entre que las cosas cambien o se deterioren hasta el punto en el que ya no hay nada para hacer
