Somos egoístas naturalmente los humanos?

Creo que estás en una disyuntiva que es muy común y natural, ahora bien, eso no debe bloquear tu derecho a tener una vida plena y satisfactoria y luchar por aquello en lo que crees y por lo que deseas. Creo que la idea de que luchar por uno mismo no tiene sentido o es egoísta es de lo más desacertada, pues eso es precisamente, lo que más sentido tiene, de hecho es lo único que tiene sentido. Si no terminas de comprender esto, haz la prueba. La experiencia no miente y no juzgues a la experiencia, simplemente acepta las cosas como son.

Para descubrir el sentido de luchar por uno mismo, debes reconocer que no eres mejor que los demás, a pesar de tus preocupaciones por lo moral y tus buenas intenciones, estos son problemas que nos atañen y afectan a todos y que cada uno tiene que resolver. El fin es salir adelante cada uno con sus medios y procurar al mismo tiempo ser feliz.

La verdadera pregunta es ¿Quién soy? Donde lo importante no es el qué ni el por qué, sino el cómo funcionamos, lo que nos llevará a la respuesta.

El conflicto moral, se produce no tanto por dudar de merecer aquello que se desea, sino por lo que hay que hacer para obtenerlo. Es el precio que hay que pagar lo que hace desistir. Si para obtener esto hay que hacer esto otro, entonces ocurre el cataclismo: Un mundo en que para satisfacer este deseo que entiendo lícito y natural, se tenga que pasar por acciones que produzcan tal conflicto moral, no vale la pena. Este es el primer bache donde se empieza a ver de qué está hecho cada uno y lo que hasta la fecha lleva entendido de este mundo.

Ante los motivos para no actuar, se debe distinguir entre miedo y moral. Si tememos mostrar nuestros deseos a los demás, por vergüenza, eso es falsa moral, es decir, se basa en lo que creemos que está bien visto socialmente, que es distinto de la moral individual o ética. Avergonzarse de desear algo que los demás obtienen es fruto de una mala educación. La moral inhibe de cosas que no es que sean inmorales, es que se nos ha inculcado que lo son y nos lo hemos creído. Si todo el mundo acatara esa moral todo iría bien, el problema es que esto no es así. La conclusión es que si no se lucha por lo que se desea, es que no se desea realmente. La falsa moral se ha de vencer y ha de surgir el individuo tal cual es, con su propia moral.

La auténtica moral surge cuando no hay impedimento ni consecuencias para hacer algo y a pesar de eso no se hace. Solo la moral es capaz de inhibir de ciertas acciones y lo es solo si las convicciones son verdaderas. De igual modo el ser moral libre, lucha por lo que quiere aun cuando le cueste un gran esfuerzo y aun cuando sea objeto de envidias.

Quienes reivindican derechos, son por lo general, quienes no los tienen y tales derechos siempre suponen alienar una ventaja que otros de forma natural están ejerciendo. Así, cuando se habla de moral, se tiene que tener claro si lo que se reivindica es un bien que debería ser universal y estar al alcance de todos o se trata de un privilegio que cada individuo debería ganarse con sus facultades y frente a los demás.

Por citar un punto de carácter opuesto, considero que sería incapaz de negar ciertas cosas a quienes no las tuvieran, porque considero que el no tenerlas no es en realidad algo que deba sancionarse, es más, si se les culpa de ello, y se les niega, no haríamos sino contribuir a la misma ley que nos ha traído a esta realidad, donde mucha de la pobreza es el resultado de actos no ya inmorales sino criminales. Hago esta aclaración porque un texto tan reducido no da para dejar clara la intención o el criterio. Son muchos los aspectos a tener en cuenta y no podemos olvidar todos lo que son una realidad tanto de un lado como de otro.

Hemos de hacer caso de lo que somos aquí en la tierra, tomando como referencia a lo que pertenecemos, allí en el cielo. En el plano desde el cual entendemos lo que ha de ser el mundo allí en el cielo, se encuentra la coherencia para andar el camino aquí en la tierra. Hay que servir a lo que se pertenece, para recibir la ayuda que corresponde. Olvida la lógica, haz caso de tu instinto y aparecerá la lógica.

Una forma de conocerse es verse investido de un gran poder, cosa que raramente sucede. Esto obliga a los hombres a conocerse a sí mismos en ausencia de ese poder jugando a ser dioses desde su caja de cerillas, emulando que renuncian a ese gran poder a cambio de una gran moral, por la que desean ser reconocidos, aunque en el fondo lo que ansían es el poder al que por naturaleza tienden. El poder tiene muchas formas y no solo pretende el control sobre otros, o someterles, sino que es una forma de libertad individual que les libere de otros. Se trata de sentir que uno está sentado en la cima de una montaña desde la que observa el mundo y desde allí, hace su voluntad. Si en la cima de tu montaña hay sentada otra persona, entonces no eres libre. Hay quien a pesar de no ser los dueños de su mundo, se sienten como si lo fueran..

Tal sea la visión sobre lo que se considere como verdad mayor, tal será la visión que se obtenga sobre cualquier otra cosa o aspecto que esté por debajo de esa verdad. Es una especie de teorema de Tales aplicado al ser humano y a su forma de ver el mundo. Para una persona que piensa que el ser humano es A, todas las opiniones derivaran de A. Para una persona que piensa que el ser humano es B, todas las opiniones derivaran de B. Para una persona que considera la cuestión anterior como la principal, todas las otras cuestiones se supeditarán a esta y su opinión al respecto será su verdad mayor, a la que también se supeditará el resto de sus opiniones. Sin embargo, si un individuo no se entiende a sí mismo ni su escala de valores, y no entiende el mundo en el que está, raramente podrá hacer una sola cosa coherente consigo mismo y cuando la haga no sabrá por qué.

Hay que distinguir los puros convencionalismos de lo que realmente importa. Lo que realmente importa no es ajeno a la mayoría de las personas y basta un pequeño ejercicio de atención para darse cuenta. Lo que cambia de unas a otras es la importancia que conceden a sus propias creencias y el valor para defenderlas, su interacción con los demás, con los objetos y con la naturaleza. Uno se puede basar y creer en los convencionalismos y la fuerza relativa que da el poder de la ley del hombre, es decir, la ley de los poderes terrenales tal como los hemos organizado. También puede no hacer desdén de ese poder terrenal y contemplarlo con respeto pero no servir ni servirse de ellos.

El dinero

Trata de ver tu comportamiento con el dinero a la hora de gastar y para ello no pienses en si es moral o no, sencillamente observa el tipo de placer que te da el gastarlo en algo que te gusta y el placer que luego eso que has comprado te proporciona. Luego observa tu sensación cuando lo percibes, o sea cuando te pagan por tu trabajo. Considera si tienes la oportunidad de hacerlo, el efecto de cobrar por algo que has hecho gracias a tu talento. Percibirás que el dinero no solo tiene aspectos detestables, sino que también alberga valores que tiene que ver con lo mejor que hay en ti y disfrutar de eso para nada es inmoral. Lo inmoral sería no hacerlo. Todo cuanto somos como personas debe realizarse, es decir, materializarse en acciones y eso solo se logra interactuando con el mundo. El dinero, es el valor que reconoce el mundo en las acciones para ganarse la vida, a nivel material, aun no entramos en si son buenas o malas. Ese reconocimiento es esencial para la persona, permite ser autónomo y verse como un igual, es nuestro derecho a vivir en sociedad, relacionándonos con los demás al mismo nivel.

Es un sistema construido por nosotros para el intercambio, por lo que el valor es totalmente subjetivo, sirve para determinar quién se puede apropiar o beneficiar de las cosas o servicios. El sistema crea una división de la riqueza que el sistema hereditario y el peculiar uso del dinero, contribuye a perpetuar.

Al pensar en el dinero como algo mezquino, se reniega de todo aquello que se ha adquirido con dinero y de la satisfacción que ha producido. Son muchos los que rechazan la idea de que el gobierno de a otros, algo por lo que ellos han tenido que pagar. Es una idea mezquina y totalmente inmoral, que sirve para ilustrar cómo se sostiene el sistema. El dinero lleva inmerso el valor de lo que se ha hecho para ganarlo y eso implica horas de trabajo, dificultades y privaciones, pero más importante, involucra aspectos del ser humano más sutiles y a los que es mucho más sensible y que tienen que ver con sus relaciones sociales, su estatus o libertad, grado de sumisión a un sistema que lo obliga y lo sitúa en una posición no preferente, etc. Quien ha pasado por esto, obliga ineludiblemente a los demás a pasar por lo mismo para medirse con él, en igualdad de condiciones, es decir, he aquí el derecho adquirido con el trabajo de codearse con los demás al mismo nivel.

El dinero como tal, sirve para transformar el trabajo en cosas que gustan y que dan el aspecto material a la felicidad, donde lo material no es banal, ya que la felicidad no se puede construir en el aire, y representa el fruto del esfuerzo. Si tenemos en cuenta que uno es lo que hace, las pertenencias representan, en cierto modo, lo que somos, lo cual no hay que tomarlo en sentido cuantitativo donde es más quien más tiene. Evidentemente la forma de ganar el dinero constituye un punto clave, pero no entraré en esto porque doy por supuesto que el medio de ganar dinero que estas considerando o utilizando no te representa un conflicto.

Nuestra realidad terrenal se basa en un sistema de valores particulares que se avengan a nuestra forma de vida, para crear un mundo ordenado en el que moverse. El mundo del ser humano es un mundo dentro de otro mundo. El mundo tal cual nos es dado, no tiene reglas más que las de la naturaleza, donde el ser humano se ve perdido. Los griegos, plasmaron esta idea delimitando estos dos mundos con las cuatro líneas que conformaban la ciudad. Dentro de la ciudad, se hallaba el mundo conocido, el que estaba creado por el hombre, que con su ley le permitía vivir ordenadamente. Fuera de esas cuatro líneas, se hallaba un mundo totalmente desconocido. Digo todo esto para dejar claro la fragilidad de lo que consideramos real y hacer ver que todo es pura invención, una invención de la que no nos podemos librar porque está tan enraizada en lo que somos que dependemos de su equilibrio más que del propio equilibrio de la naturaleza.

Lo que cuenta en última instancia es uno mismo. Es decir, uno acepta someterse a ciertas cosas y no a otras, y así termina siendo la medida de todas las cosas. En eso consiste una vida, en elegir y en ser consecuente con esa elección, por tener claro que es la única y mejor que puede tomar. Quien no elige, nada pierde y a nada renuncia, pero nada gana y por nada es reconocido, porque nadie verá en él grandiosidad, sino vaciedad. Se pequeño, con tus defectos y pequeños vicios, muestra tus habilidades y lucha por lo que deseas y la gente reconocerá tus virtudes, pero trata de ser perfecto y solo conseguirás desprecio.

La imperfección puede ser una de las cosas más difíciles de aceptar, pero si se acepta con humildad, las virtudes que acompañen a la persona pueden llevarla a lo sublime de esta vida, sin necesidad de asumir un gran poder, más que el que se puede asumir sobre uno mismo.

El EGOÍSMO es una herramienta de la evolución y de seguridad para buscarla...

El EGOÍSMO es bueno la tiranía y el atropello NO...

Sin EGOÍSMO fueras un papel tirado en el suelo...

MOPE

Lo de los sentimientos, es algo subjetivo, se podria tomar como referencia lo que dijo Aristoteles, que hablaba de la virtud, como que es el habito del justo medio. Justo medio: ni malo ni bueno, ser justo, ni mucho ni poco, etc, en ese caso, el egoismo estaria mal, y el dar de mas en exceso tambien, se puede dar, pero no, en casos de ayuda economica, en soportar a la pareja por ej. algo que se insiste mucho, la persona que da y da, y el otro no da nada, se termina al final, hay personas que creen que son buenas, que dan, que se conforman con que hacen donaciones, y son personas de actividad dudosa, otras creen que es normal que "el pez grande se come al chico", pero eso, es del mundo animal, cada cual, piensa diferente, deberas encontrar, tu propio sentir, lo demas, seran opiniones personales que te podran orientar, pero no definir. Sds.