Creo es importante saber cuándo parar... Y, francamente, esa es la parte que jamás entendí.
Soy Juan, tengo 21 y... Verán, necesito un consejo muy sincero respecto a esta situación, porque no quiero continuar con esta duda... Les platico:
A este amigo lo conocí hace casi 5 meses (él tiene 25)... E, inesperadamente, me encariñé con él. Habían muchos detalles de él que me llamaban la atención, me parecía super interesante y etc. El punto es que me ilusioné con él, realmente quería seguir compartiendo con él.
La cuestión es que después de 3 largos meses (para mí) de felicidad e ilusión, él se fue una semana para su pueblo... Y cuando regresó lo noté algo distinto, sumamente indiferente y, bueno... Traté de hablarlo con él pero no quiso decirme nada.
Y bueno, yo tomé distancia absoluta. Él lo notó, sin embargo, no hizo nada por recuperar nuestra convivencia. Es como si hubiese perdido todo el interés que tenía al principio por mí (o quizá nunca lo tuvo y yo lo malinterpreté todo...).
Honestamente, a este punto, ya no sé qué creer.
Yo inicié un proceso de duelo porque, aunque soy consciente de que fue muy poco tiempo para algo "serio", igual yo involucré muchas emociones y bueno... Para mí fue un montaña rusa; fue pasar de estar en el cielo al subsuelo. En fin.
Todo lo anterior es pasado, tiene ya un tiempo... La cosa es que él es mi compañero de clases y bueno, de vez de cuando, nos toca trabajar juntos y, particularmente, hoy que trabajamos juntos volví a sentir alguito de lo que había dejado de sentir... Como ese "interés", esa comodidad y familiaridad al hablar con él.
Ya lo que fue, no será nunca más... Sin embargo, me he preguntado ¿qué hubiese sido si esa amistad hubiese fructificado? ¿Si todo se hubiese desarrollado de forma diferente?
Porque hoy, por momentos, lo miraba con otros ojos, con ojos de esperanza, de creer que quizá si sea posible construir un vínculo con él, sin embargo, yo mismo me reprendía porque siento que son pensamientos irracionales, distorsiones mentales propias de la ilusión pasada...
No sé si realmente valga la pena luchar por una amistad así, ya que él tiene muchas cosas que no me agradan, como su carácter (principalmente); tiene muchos problemas para demostrar lo que siente, a veces también es algo grosero con los demás, un poco amargado y también algo resentido... Pareciera una persona mayor... Y sí, sé que todas son alertas amarillas para tomar distancia... Pero, no sé, a veces es como si sintiera que debajo de todo eso hay un buen corazón y una esperanza infundada en que probablemente algún día cambiará.
¿Qué opinan? ¿dejo las cosas como están... O qué hago?