Hiperactividad
Hola buenos días .tengo un niño de 8 años pa 9 esta diagnosticado con tdh desde los 3 años .lleva 2 años a tratamiento ha tomado concerté, rubifen, tranxilium, ¿y ahora esta con 35 mg de strattera .el problema es que ninguno le ha venido bien pero ahora cada vez esta peor se avuelto muy agresivo cuando antes no lo era .mi pregunta es pude que la medicación le este causando problemas en vez de arreglarlo?
Respuesta de anavr
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Efectivamente lo que citas, puede ser secundario a la medicación, pudiendo producir todos ellos dar lugar a aumento de la hostilidad o agresividad, (abajo te dejo algún enlace sobre ello); pero también los síntomas que refieres pudieran ser secundarios a que el trastorno inicial hubiera quedado sin tratar, habiéndose limitado únicamente a tapar ciertos síntomas, y hubiera derivado en lo actual, sin haberse tratado tanto los factores del niño, como familiares, que hubieran favorecido la sintomatología, que ahora, ya por segundo, o más, aviso, convendrá tratar sin demora.
En cualquier caso siempre será útil el tratar todos los aspectos psicológicos implicados en este asunto. Te dejo aquí el siguiente trabajo por si te puede servir en la forma de tratar a tu hijo:
http://influenciavaloresmoralesensalud.blogspot.com/
Y te recomendaría siempre lo siguiente en tu trato con tu hijo:
1.-Trato siempre correcto. El que su comportamiento pudiera no ser correcto, no justifica el que el tuyo no lo sea. Y si no te sale, o alguna situación te desborda, en el momento que te des cuenta, rectificas, pidiendo perdón por tu conducta (sin necesidad de recriminar la del otro, incluso aunque éste se hubiera portado peor que uno; aunque en el caso de la relación entre adultos y niños, siempre es mucho más responsable, en general, el adulto), si así lo considerases desde el punto de vista de hacer el bien, y asumiendo las consecuencias de ello (sabiendo que uno ha complicado un poco más el asunto); la petición de perdón tiene que ser de verdad, es decir, que si el otro no acepta tus disculpas, tú sigues respondiendo con el mismo método: correctamente y con buena intención.
2.-Pensando en el bien real, no sólo en el bien superficial, de tu hijo, y que esto esté por encima de tus intereses. No te tienes que guiar sólo porque tu hijo cambie en una conducta que a ti te interesa, o incluso que crees mejor, como último objetivo. Cualquier objetivo intermedio siempre tendría que estar englobado en un objetivo mayor, más amplio y generoso, que sería, con respecto a tu hijo, el que tenga una vida con pleno sentido, que encamine sus cualidades, limitaciones, etc. hacia hacer todo el bien que pueda. Si fueras una persona muy perfeccionista, no puedes supeditar tu deseo de perfeccionismo, más o menos al servicio de tus necesidades emocionales, al bien de verdad. Así por ejemplo no sería útil el decir ante una determinada conducta: "esto no se puede consentir", si no está dentro de este objetivo mayor, ya que la realidad no es que no pueda ser, sino que es, y frente a ella, uno no puede situarse negándola, sino que lo más sano y útil sería situarse frente a la realidad, queriendo mejorarla pero desde su raíz, no desde la superficie (como si uno tiene una cañería rota y sólo quiere solucionar, el agua que ve en el suelo, dedicándole a esto más esfuerzos que los convenientes, o inútiles o contraproducentes, ya que lo que es el aviso del problema no es el problema en sí mismo, que quizá convenga resolver cuanto antes). En las manifestaciones de los niños siempre hay que tener en cuenta el ambiente familiar, como potencial creador del problema. Y esto no es para culpabilizar inútilmente a nadie, sino para buscar una solución válida y buena para todos, ya que los problemas no desaparecen porque no se reconozcan, sino que los problemas si no se tratan, van a más. El que los padres tengan, y se ayuden entre sí a tener una vida con sentido, es algo fundamental.
Y, por supuesto, que no sería sano el que tu único objetivo en la vida fuera tu hijo o tu familia o allegados, sino que es más sano un objetivo más sano y generoso;yo te recomendaría pensar con tu vida en hacer todo el bien que puedas a la humanidad, por encima de tus intereses, de esta manera pensarás en hacerle el bien de verdad a las personas, no sólo en sus aparentes bienes de complacencia o intereses. En este sentido te dejo abajo un blog de actitudes saludables, y varias recomendaciones de películas y libros.
Si tu hijo es agresivo no se trata de tratar, sólo ni principalmente, esta manifestación, sino que se logra mucho más yendo al origen, y, en este sentido, estimulando lo positivo, fomentando que tu hijo se guíe por hacer el bien. No se trata de atender ni de recriminar cada una de las manifestaciones agresivas (menos guiada por motivos emocionales, o pensando que las cosas se resuelven de esta manera, pretendiendo que los síntomas se resuelvan sin resolver el origen de ello, tampoco nunca sentirse obligado por los respetos humanos a decir nada, esto sería exponer al niño a empeorar, al anteponerse los propios intereses a su bien de verdad).
No necesitas decir nada ni contestar necesariamente ante cualquier nuevo detalle, sino que es fundamental el tener buena intención, verlo todo pensando en la mejora del interior y encaminarse a ello, no entreteniéndose en recriminaciones inútiles, que no solamente puedan agravar el cuadro, sino que puedan generarlo.
Es importante que no pretendas controlar ningún resultado, y en general consecuencias de tus actos, más allá de lo razonable, y encaminado al final objetivo más amplio. Si uno quiere controlar un resultado como sea tendría que encenderse una luz indicando que uno se está guiando por sus intereses superficiales, y no se está abriendo a un objetivo más generoso de hacer el mayor bien que uno pueda, dentro de las circunstancias que a cada uno le toquen vivir; por esta vía, no se tendrá además la osadía de pensar que todo depende de uno, sino que uno hará lo que considere con el mejor objetivo y confiará, viendo los resultados también desde el punto de vista generoso, y no interesado.
Un saludo.
Ana Vázquez
[email protected]
http://actitudessaludables.blogspot.com
P.D. Varias películas recomendables en convicciontv.cl/peliculas o algunas que se pueden encontrar a partir de la siguiente: http://www.lafecatolica.com/pelicula-y-biografia-de-san-jose-de-cupertino/1189/ Muy recomendable Introducción a la vida devota de San Francisco de Sales, o La Noche Oscura de San Juan de la Cruz (o todo lo de este santo y de Santa Teresa), los cuales se pueden encontrar fácilmente en Internet como en http://www.statveritas.com.ar/Libros/Libros-INDICE.htm, o en la editorial Apostolado Mariano.
A ver si le gustan a tu hijo:
http://www.youtube.com/watch?v=D9YYORm2MMo
http://www.youtube.com/watch?v=XGZp32EWXFg
Dice:
"Más importante que saber lo que está mal, es hacer el bien.
Si la ley pudiera ser cumplida. . Sí, cumplida por amor. Qué pasaría si amáramos a otros como a nosotros mismos; más que a nosotros mismos. Estaríamos llenos de piedad y compasión.
La ley es buena, pero no puede cambiar nuestro corazón, ya que un hombre puede amar la ley y odiar a su hermano, pero cuando el amor llena nuestros corazones, habremos cumplido con la Ley."
http://www.youtube.com/watch?v=-KU42utdnUw
Sobre el Ritalín:
http://www.aemps.es/actividad/alertas/usoHumano/seguridad/NI_2009-01_metilfenidato.htm
Ficha técnica de Strattera:
https://sinaem4.agemed.es/consaem/especialidad.do?metodo=verFichaWordPdf&codigo=67658&formato=pdf&formulario=PROSPECTOS
En cualquier caso siempre será útil el tratar todos los aspectos psicológicos implicados en este asunto. Te dejo aquí el siguiente trabajo por si te puede servir en la forma de tratar a tu hijo:
http://influenciavaloresmoralesensalud.blogspot.com/
Y te recomendaría siempre lo siguiente en tu trato con tu hijo:
1.-Trato siempre correcto. El que su comportamiento pudiera no ser correcto, no justifica el que el tuyo no lo sea. Y si no te sale, o alguna situación te desborda, en el momento que te des cuenta, rectificas, pidiendo perdón por tu conducta (sin necesidad de recriminar la del otro, incluso aunque éste se hubiera portado peor que uno; aunque en el caso de la relación entre adultos y niños, siempre es mucho más responsable, en general, el adulto), si así lo considerases desde el punto de vista de hacer el bien, y asumiendo las consecuencias de ello (sabiendo que uno ha complicado un poco más el asunto); la petición de perdón tiene que ser de verdad, es decir, que si el otro no acepta tus disculpas, tú sigues respondiendo con el mismo método: correctamente y con buena intención.
2.-Pensando en el bien real, no sólo en el bien superficial, de tu hijo, y que esto esté por encima de tus intereses. No te tienes que guiar sólo porque tu hijo cambie en una conducta que a ti te interesa, o incluso que crees mejor, como último objetivo. Cualquier objetivo intermedio siempre tendría que estar englobado en un objetivo mayor, más amplio y generoso, que sería, con respecto a tu hijo, el que tenga una vida con pleno sentido, que encamine sus cualidades, limitaciones, etc. hacia hacer todo el bien que pueda. Si fueras una persona muy perfeccionista, no puedes supeditar tu deseo de perfeccionismo, más o menos al servicio de tus necesidades emocionales, al bien de verdad. Así por ejemplo no sería útil el decir ante una determinada conducta: "esto no se puede consentir", si no está dentro de este objetivo mayor, ya que la realidad no es que no pueda ser, sino que es, y frente a ella, uno no puede situarse negándola, sino que lo más sano y útil sería situarse frente a la realidad, queriendo mejorarla pero desde su raíz, no desde la superficie (como si uno tiene una cañería rota y sólo quiere solucionar, el agua que ve en el suelo, dedicándole a esto más esfuerzos que los convenientes, o inútiles o contraproducentes, ya que lo que es el aviso del problema no es el problema en sí mismo, que quizá convenga resolver cuanto antes). En las manifestaciones de los niños siempre hay que tener en cuenta el ambiente familiar, como potencial creador del problema. Y esto no es para culpabilizar inútilmente a nadie, sino para buscar una solución válida y buena para todos, ya que los problemas no desaparecen porque no se reconozcan, sino que los problemas si no se tratan, van a más. El que los padres tengan, y se ayuden entre sí a tener una vida con sentido, es algo fundamental.
Y, por supuesto, que no sería sano el que tu único objetivo en la vida fuera tu hijo o tu familia o allegados, sino que es más sano un objetivo más sano y generoso;yo te recomendaría pensar con tu vida en hacer todo el bien que puedas a la humanidad, por encima de tus intereses, de esta manera pensarás en hacerle el bien de verdad a las personas, no sólo en sus aparentes bienes de complacencia o intereses. En este sentido te dejo abajo un blog de actitudes saludables, y varias recomendaciones de películas y libros.
Si tu hijo es agresivo no se trata de tratar, sólo ni principalmente, esta manifestación, sino que se logra mucho más yendo al origen, y, en este sentido, estimulando lo positivo, fomentando que tu hijo se guíe por hacer el bien. No se trata de atender ni de recriminar cada una de las manifestaciones agresivas (menos guiada por motivos emocionales, o pensando que las cosas se resuelven de esta manera, pretendiendo que los síntomas se resuelvan sin resolver el origen de ello, tampoco nunca sentirse obligado por los respetos humanos a decir nada, esto sería exponer al niño a empeorar, al anteponerse los propios intereses a su bien de verdad).
No necesitas decir nada ni contestar necesariamente ante cualquier nuevo detalle, sino que es fundamental el tener buena intención, verlo todo pensando en la mejora del interior y encaminarse a ello, no entreteniéndose en recriminaciones inútiles, que no solamente puedan agravar el cuadro, sino que puedan generarlo.
Es importante que no pretendas controlar ningún resultado, y en general consecuencias de tus actos, más allá de lo razonable, y encaminado al final objetivo más amplio. Si uno quiere controlar un resultado como sea tendría que encenderse una luz indicando que uno se está guiando por sus intereses superficiales, y no se está abriendo a un objetivo más generoso de hacer el mayor bien que uno pueda, dentro de las circunstancias que a cada uno le toquen vivir; por esta vía, no se tendrá además la osadía de pensar que todo depende de uno, sino que uno hará lo que considere con el mejor objetivo y confiará, viendo los resultados también desde el punto de vista generoso, y no interesado.
Un saludo.
Ana Vázquez
[email protected]
http://actitudessaludables.blogspot.com
P.D. Varias películas recomendables en convicciontv.cl/peliculas o algunas que se pueden encontrar a partir de la siguiente: http://www.lafecatolica.com/pelicula-y-biografia-de-san-jose-de-cupertino/1189/ Muy recomendable Introducción a la vida devota de San Francisco de Sales, o La Noche Oscura de San Juan de la Cruz (o todo lo de este santo y de Santa Teresa), los cuales se pueden encontrar fácilmente en Internet como en http://www.statveritas.com.ar/Libros/Libros-INDICE.htm, o en la editorial Apostolado Mariano.
A ver si le gustan a tu hijo:
http://www.youtube.com/watch?v=D9YYORm2MMo
http://www.youtube.com/watch?v=XGZp32EWXFg
Dice:
"Más importante que saber lo que está mal, es hacer el bien.
Si la ley pudiera ser cumplida. . Sí, cumplida por amor. Qué pasaría si amáramos a otros como a nosotros mismos; más que a nosotros mismos. Estaríamos llenos de piedad y compasión.
La ley es buena, pero no puede cambiar nuestro corazón, ya que un hombre puede amar la ley y odiar a su hermano, pero cuando el amor llena nuestros corazones, habremos cumplido con la Ley."
http://www.youtube.com/watch?v=-KU42utdnUw
Sobre el Ritalín:
http://www.aemps.es/actividad/alertas/usoHumano/seguridad/NI_2009-01_metilfenidato.htm
Ficha técnica de Strattera:
https://sinaem4.agemed.es/consaem/especialidad.do?metodo=verFichaWordPdf&codigo=67658&formato=pdf&formulario=PROSPECTOS
