Es un error común que hace la gente: en las páginas de las citas online o en los chats esconde su apariencia física, con el fin de crear una imagen más atractiva...
Si tu objetivo es conocer a una persona en realidad y no solo tener una amistad virtual, deberías ser sincera desde el principio. No podemos ignorar la importancia de nuestro aspecto físico, y no podemos juzgar si alguien no le gusta nuestra apariencia. Por tanto, para evitar el estrés que te causa la reacción de los chicos hacia tu cuerpo, lo primero que deberías hacer es no esconderlo de nadie. Si alguien está interesado en verte, no tengas miedo de ensenarle tus fotos donde se ve bien tu cuerpo (NO en bañador, evidentemente)– no lo vas a evitar cuando os veáis, así que no tiene ningún sentido esconderlo. Así te ahorrarás los disgustos que dices que ya has sufrido varias veces por la reacción de los chicos cuando te vieron.
Si no le gustas a alguien – es su problema; si alguien deja de contactarte porque resulta que no le gustan tus piernas, o tu cintura – son sus problemas, y mejor olvidar esa gente antes de verla.
Pero aparte de esto, tú tienes otro problema, mucho más importante: que no te gusta tu cuerpo. Dime, si a ti no te gusta tu cuerpo, ¿cómo puedes esperar que a los demás les guste? ¿Por qué algún desconocido tiene que apreciar tu cuerpo, o al menos no darle mucha importancia, cuando tú misma lo odias? Si no te gusta tu cuerpo, debes hacer algo para que te guste, es decir, hacer deporte, mirar lo que comes, etc. Si es que por algún motivo no quieres o no puedes lograr a bajar de peso o hacer otros cambios, deberías aceptar tu cuerpo tal y como es y AMARLO. Lo cambias o no, haces deporte o no – tú decides, pero en ambos casos debes amarlo, debes ser orgullosa de ello; es el templo de tu alma, como dijo Osho.
Una mujer no tiene que ser delgada, ni tener un cuerpo perfecto para ser irresistible para los hombres, lo que sí es importante es que quieras tu cuerpo, que quieras a ti misma – esa seguridad, ese amor que trasmite una mujer que se ama, más la ropa adecuada, el estilo, son mucho más importantes en la atracción que tener un cuerpo de los estandartes considerados como “perfectos” en la sociedad de hoy.