Como dices, te cansas de las personas, buscas alejarte de ellas, lo consigues enfadándote y no te sientes mal, no sientes pena; o más bien te extraña el no sentir pena; de alguna manera parece que no te has quedado muy conforme con tu conducta.
Sea lo que sea, de lo que dices veo varias cosas a mejorar:
1. Tomas una decisión, de alejarte de la gente, "porque te cansas" intención que creo que puedes depurar. No digo que ese cansancio no indique nada, por supuesto, ya que podría significar cosas muy buenas como que te cansas de lo superficial, de los coqueteos, como mencionas, etc. Pero para mejorar, e incluso lo que hagas hacerlo con más convicción, es no vivir para ti mismo, y enfocar la vida hacia hacer el mayor bien que puedas. No empezar con ese coqueteo que mencionas, en donde no piensas en el bien de verdad de la otra persona, y tampoco en el tuyo. Y luego a la hora de continuar una amistad o no, que te guíe siempre la buena intención. Toda amistad debe basarse en las virtudes, pero si estas no se viven, más que ayuda mutua, hay desayuda mutua, ya que lejos de ayudar a la persona a crecer como persona y a dirigirse a Dios, se utiliza a la otra persona para los superficiales beneficios personales, y eso no ayuda, sino que enreda a la otra persona, si esta también se guía por sus intereses.
2. El método que utilizas para alejarte de esas personas quizá tiene algo de engañoso. No es un método excepcional. Pero te diré otro mejor: actuar bien, bienintencionadamente. Si dejas de ser el simpático de la reunión, si dejas de alimentar intereses de tus amigos para quedar bien, si a veces dices a tus amigos las verdades, lo que les viene bien de verdad; ya te imaginas que no vas a ser el primero al que llamen, pero ahí quedará el beneficio de tu acción. Y sin darte tu cuenta, y sin hacer nada al respecto, ya habrá gente que se retire de tu lado.
Por supuesto que ya que has tenido que recurrir a estos métodos para desenredarte, lo que te recomiendo es no volver a enredarte (para lo cual hay que velar y orar), y para ello como te digo, buena intención, estando por supuesto en gracia de Dios. Te recomiendo frecuentar los Sacramentos, cumplir los Mandamientos de la Ley de Dios, y hacer oración. En la oración podrás ir viendo lo que tienes que hacer. En todo lo que hagas que te guíe la caridad.
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