Anónimo
Consulta fiscal sobre titularidad y autorizados de cuenta de persona con embolia
Mi padre está ingresado en hospital con enfermedad muy grave. No se puede mover, no puede hablar.
Mi padre es titular de una cuenta de banco, donde mi madre y yo (soy uno de los dos hijos) sólo somos autorizados.
En dicha cuenta mi madre cobra la pensión y también se cobran los recibos domiciliados de la casa.
Mis padres están casados en gananciales.
Me han recomendado que hagamos una cuenta nueva con mi madre de titular (¿los hijos también?) Y pasemos el cobro de su pensión y los recibos domiciliados a dicha cuenta. También podemos transferir algo de dinero de la otra cuenta a esta.
Sobre el resto del dinero que sigue en la cuenta en la que mi padre es el titular me han dicho que lo consulte a un notario antes de transferir a la nueva cuenta. Que hacienda podría poner pegas.
2 respuestas
¿Lo de tu padre con embolia lo sabe el banco...?
Tu y tu madre sois autorizados, supongo que sin necesidad de firma o autorización de tu padre por lo tanto podéis disponer de esa cuenta como queráis.
Pero en la situación actual lo mejor es una nueva cuenta para ingreso de pensión y pagos a nombre de tu madre e hijos, como autorizados todos.
Respecto a pasar saldo de la cuenta compartida padre, madre e hijo si sois autorizados podéis transferir el saldo... dejando algo en esa cuenta para que no se vea nada "raro"
Y cuanto menos "meneéis con abogados o notarios" mejor que mejor que por estar digamos dentro de la Ley, por lo que os digo no incumplís ninguna, estas profesiones siempre la lían... por que es su trabajo y encima cobrando minutas nada baratas
Si sois clientes antiguos del banco persona con la que tengáis confianza podría aconsejaros y si no
Le soltáis que os iríais a otro banco
Abrir una cuenta nueva a nombre de tu madre, sí, por supuesto, y domiciliar la pensión allí.
En cuanto a la otra cuenta, he entendido que ella no es cotitular, tan sólo autorizada; por tanto una transferencia importante.. hacienda te puede llamar la atención..
Una solución es que no cambiéis los recibos importantes todavía de modo que se carguen en la antigua. La cuenta con eso y otros gastos irá adelgazando, al mismo tiempo que la nueva engorda. Cuando haya poco saldo, cambias el resto de los recibos.