La clave estará en el esfuerzo que hagas para que esa situación mejore o cure definitivamente. Claro que se puede curar, puedo recomendarte darle atención a una necesidad básica en el ser humano que descuidamos muy a menudo y no sabemos como identificarla.
La mayoría de la gente desea tener cierto grado de felicidad y piensan que es muy difícil lograrla, sin embargo a mí me ha servido mucho meditar en el consejo de Jesús cuando señaló cuál es la clave de la verdadera felicidad, dijo: “Felices son los que tienen conciencia de su necesidad espiritual” (Mateo 5:3). Solo seremos verdaderamente felices si damos los pasos para satisfacer nuestra mayor necesidad: la sed de saber la verdad sobre Dios y sobre su propósito para nosotros. Esa verdad se encuentra en la Biblia, y conocerla nos ayuda a determinar lo que es realmente importante y lo que no. Cuando dejamos que la Biblia guíe nuestras decisiones y nuestros actos, la vida cobra más sentido. Fíjate como en otra ocasión afirmó Jesús: Pero él dijo: “No; más bien: ¡Felices son los que oyen la palabra de Dios y la guardan!”. (Lucas 11:28).
Una revista que leí da esos pasos pasos para sobrellevar esa situación.
Lleve una vida equilibrada.
Manténgase activo.
Duerma lo suficiente.
Aparte tiempo a diario para relajarse.
Lleve una dieta nutritiva y balanceada.
Limite el consumo de alcohol y no use medicamentos que no le hayan recetado.
No se aísle. Pase tiempo con personas de confianza que se preocupen por usted.
Cuide su salud espiritual.
Aunque la Biblia no es un manual de medicina, ofrece consejos prácticos que pueden ayudarnos a sobrellevar las emociones negativas y las circunstancias angustiosas. También nos da esperanza; nos asegura que en un futuro cercano, las enfermedades y el sufrimiento desaparecerán de la Tierra. “En aquel tiempo los ojos de los ciegos serán abiertos —promete la Biblia—, y los oídos mismos de los sordos serán destapados. En aquel tiempo el cojo trepará justamente como lo hace el ciervo, y la lengua del mudo clamará con alegría.” (Isaías 35:5, 6.)
Te lo puedo afirmar por mi, cuando empece a cuidar mi salud espiritual todos mis sufrimientos empezaron a mejora en gran manera. He puesto en práctica esos 8 pasos y puedo decirte que me siento muy bien, no te des por vencido, actúa y cuenta con nuestro apoyo.