El hijo de mi mujer me ningunea
Fuimos de viaje 15 días y solo me dio los buenos días,,, un muchachote de 32 años,,, ahora ha venido a ver a la madre 4 días y yo he desaparecido...
2 Respuestas
Las cosas en cuanto le tocan a uno se ven de forma diferente. Y los hijos suelen tener un sexto sentido al respecto de este tema. Normal que no le guste que esté con su madre un hombre sin estar casados ni nada, o sin posibilidad siquiera de casarse por ya estarlo con otras personas. No creo que esto le fuese a gustar a ningún hijo que quisiera a su madre.
Si hubiera posibilidad de contraer matrimonio te recomendaría pasar a vivir un noviazgo como Dios manda; seguro que la relación con su hijo cambiaría; y si no es posible contraer matrimonio, suspender la convivencia, y pasar a ser amigos sin más, viviendo las virtudes, y ayudándose mutuamente a ser cada día mejor.
¡Gracias!
Bueno, y si ella no quiere casarse.. que es así ,,¿ qué hago?,,,
Casarse no es obligatorio; vivir la castidad sí; así es que tú tienes que vivir conforme a lo que Dios te manda, si quieres ser feliz, hacer el bien, y llegar a tu destino, que es el cielo, después de esta vida terrena caduca.
En cualquier caso, tienes que suspender la convivencia de inmediato, ya que eso te lo prohíbe Dios, y no está guiado por el amor, sino que se trata de actos impuros guiados por el egoísmo, sin pensar en el bien de las personas, sino en un mero interés.
Acude a confesarte, si estás bautizado como me imagino; recupera la gracia de Dios, y quizá puedas ayudarla a ella a lo mismo. En gracia de Dios y esforzándote en tener una vida con sentido guiado por hacer el bien, guiado por el amor, y no por el egoísmo, podrás ver mejor las cosas. Luego en la oración podrás también ir viendo; no todo se decide en un momento; el caso es recuperar el buen camino.
Si ella no ha corregido a su muchacho por la forma como se relaciona contigo nada que hacer pues ella aceptó que así fuera. El otro asunto de fondo es que tienes que evaluar si la relación entre ustedes dos puede soportar las asperezas surgidas con la forma de actuar del hijo.
Habla con ella y expone tus inquietudes al respecto y encuentren un punto de equilibrio.