¿Cómo puedo aumentar mi autoestima permanentemente?
Soy un joven de 17 años, próximo a los 18, que aún lucha contra muchas cosas a la vez: fobia social, timidez, vergüenza pública, baja autoestima, inseguridades, inmadurez, celos, conductas egoístas y caprichosas. Y bueno, otras tantas que, quizá aún, no descubro.
A ver, para que me entiendan de donde surge todo esto y que me llevó a tomar la decisión de salir de aquí: fuí el típico niño consentido durante muchos años en mi casa hasta la llegada de mi hermana, nunca me consideré excesivamente consentido sin embargo conductas que presento hoy día parecen decir otra cosa. La crianza que recibí, por un lado (mi padre), fue sumamente autoritaria, dictatorial y tirana; donde no se me permitía expresar sentimientos porque según esos eran de niñas. Eso (luego de investigar) me hizo ser muy reservado, al punto que, hoy día sólo puedo ser yo con personas de entera confianza. De lo contrario, simplemente no soy. Mi padre siempre fue sólo dar dinero y regañar, fin.
Mi madre, por otro lado, la típica madre amorosa y algo consentidora, en ella sí estaba el premiar a sus hijos no sólo con lo material, sino también, con lo afectivo. Pero tristemente, ella también fue (junto con mi padre) muy sobreprotectora... Lo cual me hizo ser muy de casa; prefería quedarme en casa a salir con amigos. Bueno, ¿y qué amigos? Sufrí mucho bullying, por todo lo anterior, fuí un niño de personalidad algo delicada e inocente hasta entrar a un colegio público; en el cual, me encontré con una realidad totalmente diferente y muy cruel a la que estaba acostumbrado en la "guardería" a la que asistía hasta segundo grado. Desde ese día toda mi vida cambió, iniciaron casi 8 años (o más) de bullying, de rechazo y burlas, muy fuertes para mí... Mi autoestima estuvo por los suelos durante muchos años... Ya me había acostumbrado a ser el juguete de la gente. Obviamente, todo tiene un final y, afortunadamente, puedo decir que mi último año de colegio fue el mejor... Porque todas esas personas que en un pasado me agredieron (sólo psicológicamente, nunca físicamente, o quizá sí pero nada gravísimo... Y eso sólo los primeros años, luego ya fueron sólo insultos) ahora intentaban ser mis amigos... Pero muy tarde, yo ya tenía la personalidad moldeada y casi siempre estaba a la defensiva. En fin, no fue un sufrimiento para nada ese año... De hecho, otros hechos más bonitos pasaron ese último año, por primera vez supe lo que era tener un amigo (o bueno, una amiga, en este caso) alguien que no me juzgó, alguien que me aceptó tal como era y siempre estuvo ahí. En fin.
Lo anterior, solamente, tiene como propósito contextualizar un poco de qué tipo de persona estamos hablando. El detonante fue que, de manera muy resumida, hace días rompí una relación amistosa de manera "civilizada", y a la vez, algo "fatal". Ya llevo mucho tiempo tratando mi baja autoestima y todo lo mencionado anteriormente; por momentos me siento mejor, como si me pudiera comer el mundo... Pero por otros es como si "se me olvidara quererme" y para cuando me doy cuenta ya la regué, dije cosas que nunca debí decir... Entonces, todo iba bien, pero sin darme cuenta (no queriéndolo aceptar), la ruptura anterior si maltrató mi autoestima y me quise hacer el sordo.
Llevo tiempo luchando contra la necesidad de hablarle a alguien... Me falta un mes para entrar a la universidad, y todo este tiempo lo he pasado en casa sin hacer nada. Cansado de esta situación le propuse a mis padres hace semanas trabajar o que me ingresaran a algún curso dónde pudiera conocer gente real; ellos aceptaron lo segundo pero el tiempo ha pasado y aún no encuentro el curso ideal, y por lo que veo, ya no se podrá... Sólo puedo esperar a iniciar la universidad.
Gente, cuál es mi problema: miren, la ruptura anterior fue, esencialmente, un rechazo de esa persona hacia mí por mis creencias religiosas... Eso me decepcionó profundamente porque no sólo por la persona, sino por mí. Esa persona desde el minuto uno se mostró bastante diferente a mí, tanto en su forma vulgar de hablar, como en otras cosas... Sin embargo, ahí seguía yo no sé por qué, quizá sus otras cualidades me hicieron quedar y que, en realidad, todo iba bien hasta que hablamos de religión. Él insultó mi fe diciendo que le parecía: "inserte infinidad de insultos" y que, además a él no le importaba si eso me ofendía, que así pensaba él y punto. Lo cual me incomodó, no por pensar diferente a mí, sino por su total falta de empatía y compresión conmigo, él fue muy soberbio... Y bueno, eso al final me decepcionó no sólo por él sino porque vi que, en realidad, desde el minuto uno yo debí de haberme hecho respetar y si él no quería cooperar debí de haberle dejado de hablar hace mucho. Pero en fin, eso me ha dejado algo lastimado en el sentido de que empecé a entrar en un modo "un clavo saca otro clavo" y traté de buscar consuelo donde no lo hallé (no tuve con quién desahogar esa decepción). Al final, me refugié en mi fe, y sólo así logre evitar otra profunda depresión... Pero sé que necesito sanar porque me siento muy necesitado de atención y sé que no está bien. Hace días estuve buscando nuevos amigos (ahora sí en comunidades religiosas, para evitar lo anterior) y comencé a sentirme como me sentía hace tiempo, si alguna persona me hablaba (por ejemplo) yo me ilusionaba full y empezaba a buscarle largo (nunca llegaba a abrirles chat pero sí me ponía muy pendientes de las interacciones que tuvieran conmigo: likes, comments etc)
Ya no quiero seguir así, ayuda.
Bien explicado y con mucho tacto. Agradecido deje las supersticiones religiosas de lado. Por desgracia es donde todo creyente se cree con derecho a mentar a su dios y recomendar seguirle a ciegas...mientras esta gente está a punto de resbalarse en un abismo de inseguridades personales. Un aplauso. - karayudo Lorenz