Anónimo
¿Me pueden obligar a vender una herencia que aún no recibí?
Somos dos hermanos que nos correspondería heredar en un futuro una vivienda cada uno cuando mi madre fallezca. Mi madre conserva parte de la propiedad y el usufructo mientras viva y nosotros no hemos heredado aún.
Hace años, mi hermano me comentó la posibilidad de también quedarse con mi vivienda, él me iría entregando pequeñas cantidades de dinero a cuenta y acordaríamos un precio final cuando falleciera mi madre. Mi madre aún vive, no hay contrato ni verbal ni escrito, no me reuní con él para acordar una venta, no hay condiciones, no se puso precio a la vivienda, no me ha pagado el piso, ni precio de venta alguno y yo no quiero venderle mi vivienda que ni siquiera he heredado aún, ni ahora, ni cuando fallezca mi madre.
Mi hermano dice ahora, y ante la familia, para chantajearme sin pruebas, que me ha entregado durante estos años 45 mil euros. Realmente pudo ir entregando 6 o 7 mil euros en transferencias.
Yo no estoy dispuesto a venderle la vivienda por su mal comportamiento, aunque sí devolverle las transferencias reales que me hizo, pero nunca la falsedad que dice que me pagó.
Si no existe contrato alguno, ¿puede obligarme a venderle la casa?
Un cordial saludo y muchas gracias por su ayuda y su tiempo!
4 respuestas
Hasta heredar y no saber que hereda cada uno, no se sabe.
Nadie puede obligar a vender a otro.
Cada uno decidirá que hacer con su parte
Tiene que haber testamento
No sé de que te preocupas. Si no hay contrato escrito ni el puede demostrar documentalmente haberte entregado este dinero nada de lo que diga tiene validez. Duerme tranquilo.
… Pero atiende a lo que te ha dicho “Pedro abogado” pues si el asunto acaba en los tribunales tendrás que explicar la razón por la que recibiste estos seis o siete mil euros, y un abogado hábil de la parte contraria puede ponerte en un apuro.
Plantea usted una situación muy peculiar. Debe partir del antiguo aforismo latino -Verba volant, scripta manent-, Las palabras se las lleva el viento.
La realidad, que usted mismo reconoce, es que su hermano le ha hecho transferencias por importe de seis o siete mil euros, cantidad nada despreciable en mi opinión, habría que hacerse la siguiente pregunta ¿En concepto de qué se entregaron esas cantidades? Recuerde el plato de lentejas que entregó Jacob a Esaú como precio de su primogenitura, sobre todo si esa averiguación termina en el juzgado.
