Fobia canina
Muy buenos días,
Dr., desde niño he sentido un miedo extraño a los perros que, de alguna u otra manera, ha limitado mi desarrollo pleno. En los día de infancia, el temor era exagerado, eso me hacia abstenerme de jugar en el parque con mis amigos, siempre pensando en la posibilidad de que algún perro apareciera por allí. Luego, ya en la adolescencia, la cosa se suavizó un poco, pero igual seguía presente. Cuando tenía 13 años, decidimos comprar un perrito; resultó ser una perrita de raza boxer con la cual tenía muy buena relación (excepto en sus ratos de molestia), eso me hizo comprobar que mi miedo no era exactamente a los perros, sino más bien, a la posibilidad de ser atacado por uno de ellos.
No le tengo miedo a los perros pequeños, ni a los perros que se que son mansos. Me abstengo de salir a ciertos lugares siempre pensando en que puede haber un perro que me puede atacar. He sondeado con mi familia cuales son los origines de dicho problema (porque vaya que lo es), pero no hay una información concreta. La hipótesis más fuerte y plausible expone que dicho trastorno se remonta a mi más incipiente infancia, época en la cual me expuse al ataque de un perro (tengo entendido que no me mordió, lo cual no se, pues estaba muy pequeño: tendría 3 años, aproximadamente).
De verdad, aunque ya he aprendido a convivir con dicha fobia, me fastidia, la detesto, porque me limita más o menos. Que sugerencia me puede dar,¿Dr.?
Agradezco su atención,
Muy atentamente,
JCR
Dr., desde niño he sentido un miedo extraño a los perros que, de alguna u otra manera, ha limitado mi desarrollo pleno. En los día de infancia, el temor era exagerado, eso me hacia abstenerme de jugar en el parque con mis amigos, siempre pensando en la posibilidad de que algún perro apareciera por allí. Luego, ya en la adolescencia, la cosa se suavizó un poco, pero igual seguía presente. Cuando tenía 13 años, decidimos comprar un perrito; resultó ser una perrita de raza boxer con la cual tenía muy buena relación (excepto en sus ratos de molestia), eso me hizo comprobar que mi miedo no era exactamente a los perros, sino más bien, a la posibilidad de ser atacado por uno de ellos.
No le tengo miedo a los perros pequeños, ni a los perros que se que son mansos. Me abstengo de salir a ciertos lugares siempre pensando en que puede haber un perro que me puede atacar. He sondeado con mi familia cuales son los origines de dicho problema (porque vaya que lo es), pero no hay una información concreta. La hipótesis más fuerte y plausible expone que dicho trastorno se remonta a mi más incipiente infancia, época en la cual me expuse al ataque de un perro (tengo entendido que no me mordió, lo cual no se, pues estaba muy pequeño: tendría 3 años, aproximadamente).
De verdad, aunque ya he aprendido a convivir con dicha fobia, me fastidia, la detesto, porque me limita más o menos. Que sugerencia me puede dar,¿Dr.?
Agradezco su atención,
Muy atentamente,
JCR
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Respuesta de entretiempos
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Como bien dices las fobias específicas, en este caso el miedo a los perros, suele venir determinada por una experiencia de significado "traumático" previa (aunque no siempre). En tu caso en la infancia hubo un perro que pesar de que no te mordiera, alertó tu sistema como un peligro potencial al mismo, a pesar de que tuvieras 3 años.
En psicología se suelen tratar los casos en que las fobias suelen ser incapacitantes, si dices que has aprendido a vivir con ella es una avance muy importante. Sin embargo en tú caso hay un elemento extra que está muy relacionado con las fobias específicas y que parece ser que es lo que te incomoda, le llamamos ansiedad por anticipación, es decir, sentir miedo por algo que pensamos que podría ocurrir, sin que el peligro sea real en el momento, sólo es un suceso potencialmente posible pero improbable en la mayoría de los casos. Por ejemplo, el que se va de viaje en avión y tiene fobia a volar piensa que podría caerse el avión con él/ella dentro también el día antes de volar y tiene miedo. Para esto se recomienda el entrenamiento en relajación a través de la respiración abdominal y por otro lado la técnica de la parada del pensamiento, para conseguir que el cerebro no interprete lo imaginado como un hecho real en un momento que no lo es.
En psicología se suelen tratar los casos en que las fobias suelen ser incapacitantes, si dices que has aprendido a vivir con ella es una avance muy importante. Sin embargo en tú caso hay un elemento extra que está muy relacionado con las fobias específicas y que parece ser que es lo que te incomoda, le llamamos ansiedad por anticipación, es decir, sentir miedo por algo que pensamos que podría ocurrir, sin que el peligro sea real en el momento, sólo es un suceso potencialmente posible pero improbable en la mayoría de los casos. Por ejemplo, el que se va de viaje en avión y tiene fobia a volar piensa que podría caerse el avión con él/ella dentro también el día antes de volar y tiene miedo. Para esto se recomienda el entrenamiento en relajación a través de la respiración abdominal y por otro lado la técnica de la parada del pensamiento, para conseguir que el cerebro no interprete lo imaginado como un hecho real en un momento que no lo es.
