Tengo rechazo hacia mi propia música ¿Cómo solucionarlo?

Hola, soy 00mcf00 y tengo un problema. Como dice el título, tengo rechazo hacia la música que solía gustarme. Permítame aclararle mi situación: Soy mujer y tengo 18 años. Toda mi vida escuché música en inglés y en español como la mayoría. Mi playlist era (o es, pues aún la guardo) muy variada: tenía canciones que iban desde la más alegre hasta la más triste, de la más reciente a ochenteras o noventeras, de la más movida a la más lenta, etc y así es toda.

Cuando tuve 16 años conocí a alguien. Entre charla y charla descubrimos que escuchábamos la misma música. Con el tiempo me empezó a gustar y yo a él. Nos dedicábamos canciones muchas veces. Me hacía muy feliz hablar con él y empecé a escuchar mucho más mi música después de conocerlo, eso me hacía muy feliz. Muchas veces dormía con los auriculares puestos y la música suave (tal vez para soñar con él, porque después de conocerlo soñé que lo encontraba al frente de la universidad donde él iba. Fue suficiente para sacarme una sonrisa al despertarme, aún más a él cuando le conté. Le gustaba que sueñe con él). De a poco nuestra "relación" (digo "relación" porque nunca fuimos novios oficialmente. Pese a ello nuestras charlas dejaban en claro que había sentimientos fuertes de c/u hacía el otro) empezó a deteriorarse hasta que comenzaron a haber más momentos tristes que felices. Sentí que era una pérdida de tiempo y le dije que debíamos dejarlo (duramos un año). Simplemente no hubo protesta por su parte. Lloré mucho por varias discusiones que tuvimos antes pero luego de ésto, los llantos se intensificaron mucho más (eran más constantes y más fuertes). A veces, para liberar tensión escuchaba las canciones que me había dedicado o que compartíamos y lloraba. Era una forma de desahogarme.

Dos o tres meses después, pude continuar normalmente con mi vida a excepción de un sólo detalle: No iba a soportar mi playlist (mi lista de canciones) nunca más (cabe destacar que también odio las canciones en inglés y español que salieron durante el 2013 el 2014). Varias veces apreté Play en mi ipod para distraerme pero no me hacía feliz. No quería cantar. Ni siquiera prestaba atención, así que no pasaba mucho tiempo hasta que presionaba Stop. Hace un año encontré de casualidad una artista que ahora escucho todos los días. Me dan ganas de cantar, de escuchar, disfrutar y no me cansa nunca. ¡hacía mucho tiempo que no me sentía así con la música! El problema es que canta en japonés. La artista ni siquiera existe. Es un sintetizador digital utilizado para crear canciones. Se llama Miku Hatsune. Volví a amar la música. Unos meses después de descubrirla, agradecida de que me haya devuelvo el amor hacia la música, decidí darle otra oportunidad a mi playlist. Nada. Sigue... Aburriéndome. Disgustándome. "Me niego totalmente a escuchar esta aburridísima lista de m***da. No pienso ponerla nunca más". Eso pensé la última vez. No creo que sea casualidad que me guste escuchar canciones japonesas cantadas por personas que ni siquiera existen, es decir, es totalmente lo opuesto a mi anterior lista de música.

¿Hay algo que pueda hacer para volver a querer mi playlist y/o las canciones en inglés y español? Muchas veces mis amigos me ven con los auriculares puestos y me preguntan qué estoy escuchando o si pueden escuchar conmigo, pero por vergüenza doy una respuesta evasiva. Aparte la música me ayudaba un montón a sociabilizar, después de matar ese lado mío caí en cuenta que era muy importante en mi vida social, así que también asesiné un poco de mi sociabilidad con éste cambio... Por favor ayúdeme a recuperarme, no quiero limitarme a escuchar canciones japonesas toda mi vida, quiero volver al inglés, al español, a lo que era antes de... De... ¡de todo este embrollo! Por favor quiero recuperar mi vida, le ruego ¡¡¡ayúdeme!!!

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1

00mcf00:

No se puede recuperar lo que ya no se es.

Tú has cambiado, y lo que te ha pasado es totalmente normal.

Estabas muy enamorada, tu relación terminó, quedaste muy herida, muy dolida, pero como no eran novios oficialmente, no podías desembocar todo el enojo por tu dolor hacia él, pues realmente no tenías el derecho a reclamarle por lo que estabas pasando, o lo que te estaba haciendo; a final de cuentas él te decepcionó al no tener el valor de pedirte que fueras su novia, nunca se comprometió contigo realmente.

Entonces, enfocaste todo tu enojo, odio, amargura, dolor, etc., en lo más simbólico que compartían juntos: la música, todas aquellas canciones que te hacían pensar en él, que le dedicaste en tu corazón, y que hasta te hicieron soñar con él.

Es como matar al oso de peluche que te regaló, ahora tú no puedes escuchar esa música. La detestas, la aborreces, como una forma de rechazar lo que él te hizo o es.

Y te reitero, ésto es totalmente normal.

La mala noticia es que, difícilmente cambiará.

Será más fácil que te resignes a haber perdido más que el amor, haber perdido también tu playlist favorita. Él no sólo se llevó tu ilusión, sino también tu gusto por esa música, es parte de lo que te arrebató, es parte de lo que perdiste en esa relación.

Cuando iniciamos una relación, entregamos a la otra persona lo que ya éramos antes de conocerle, lo que teníamos. Mientras más fuerte se vuelve una relación, más nos cambia, y comenzamos a construirnos a partir de lo que la otra persona nos motiva a ser. Entonces entregamos aún más de lo que somos, ponemos todo en la relación, pues hacemos que nuestra vida gire en torno a ella, especialmente lo que nos gusta y hace feliz.

Cuando la relación se termina, es inevitable que se lleve mucho de lo que somos, por lo menos todo lo que fuimos junto a esa persona se irá con ella y con las ilusiones perdidas, y ya nunca volveremos a ser lo que fuimos en ese momento, nunca más.

¿Qué queda por hacer?... volverse a encontrarse a uno mismo, y volver a construir nuestro mundo, descubrir cosas nuevas que puedan gustarnos y llenarnos, para tener nuevamente muchas cosas que dar a la siguiente persona que llegue a nuestras vidas.

Se las volverá a llevar, eso es cierto, volveremos a perder mucho, pero en el momento valdrá la pena, y pondremos otra vez todo en juego.

Ya no te aferres a esa música, déjala ir, despídete de ella agradeciéndole por las muchas ilusiones que te dio, y perdónalo a él por haberte arrebatado algo que te tanto te gustaba.

Explora nuevas melodías, encuentra nuevos gustos, y construye una nueva playlist, una que vaya con lo que eres hoy, porque has cambiado y eso también es inevitable, cada experiencia nueva nos cambia, y cuanto más fuerte es más profundamente nos transforma.

Ya no eres la niña que soñaba con música en español e inglés, ahora eres la mujer que disfruta con música en japonés, has cambiado, y esto eres hoy, no quieras volver al pasado.

¿Cuál es el problema con la nueva música, por qué te avergüenza?... Miku Hatsune es muy famosa en japón, llena conciertos, ¿qué hay de malo en que te guste?... Si te ha gustado, explora también el pop coreano, está siendo mucho mejor que el latino, te recomiendo las canciones de los grupos Miss A y Secret, pero también hay para todos los gustos.

Y ya saldrán nuevas canciones en español e inglés, que al no recordarte a él, podrás darles una nueva oportunidad, y tal vez puedan llegan a formar parte de tu nueva playlist.

Sólo date la oportunidad, camina hacia lo nuevo que puedes ser.

Me tomó un buen rato asimilar todo lo que me acaba de decir, especialmente la parte donde dijo que no volvería a ser la de antes. Me siento desmotivada, pero supongo que no puedo hacer nada al respecto. Ahora entiendo muy bien por qué odio tanto esas canciones, y tiene sentido... bastante. Voy a tratar de crear una nueva lista, con nueva música, y empezar de cero, a ver qué pasa. Su respuesta fue muy fuerte (emocionalmente), correcta y espero que su solución sea permanente, pero confío en que sí será. Muchísimas gracias, y hasta la próxima vez.

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