Estoy cansado de "mi vida" ¿Qué me pasa?

Me cuesta contar esto porque voy a hablar de personas que realmente quiero mucho. Os pongo en antecedentes:

Soy un chico normal, de padres mileuristas, que tenía desde pequeño claro que quería irse a Madrid a estudiar la universidad, y vivo a 600km de Madrid. Sin embargo, me quedé. No sé por qué, supongo que porque a última hora me ganó la pena, el saber que mi familia y amigos estarían tristes porque me fuera. Y me quedé, pero a partir de ahí todo cambió:

Días después de matricularme en mi ciudad, discutí con mi mejor amigo y con su pareja, que también era amiga mía. No fui el único en discutir con ellos, prácticamente a todo el grupo de amistades les cabreó una cosa que él nos hizo. Algo que hubiera quedado en nada si no hubiese sido porque su novia, que en un principio nos dio la razón, acabase hablándonos mal. Mi relación con mi ya ex-mejor amigo se enfrió tanto que ahora seguimos estudiando la misma carrera en el mismo sitio y viéndonos todos los días. Todo se podría haber solucionado con un "perdón" suyo. Pero no quiso. Tras meses enfadados yo y otra ex amiga suya (mi mejor amiga) decidimos hablarle y dejar entrever que nos gustaría recuperar la amistad. Pero él fue muy frío y nos dejó caer que estaba mejor sin nosotros (algo que sabemos que es totalmente falso, porque sabemos que se está quedando sin ningún amigo y su relación con su novia va mal). Pero bueno, él verá, vengo a hablar de mí:

El caso es que, tras esto, pierdo a mi mejor amigo. Siempre he sido una persona de grupos pequeños: yo tengo gente muy amiga mía o conocidos, no hay "amigos", no hay término medio. Creo que soy así por varios factores que luego contaré.

El caso es que además de este chico, ahora estoy continuamente discutiendo con mi mejor amiga, por detalles feos que estoy viendo en su comportamiento, y claro, como tenemos confianza, le digo lo que me parece mal. Y ella a mí lo que le parece mal de mi. Creo que nos hemos dicho demasiadas cosas ya, eso de que "la confianza da asco" me está ocurriendo, y estoy pensando seriamente en decirle que, pese a los buenos momentos que pasamos, es mejor que cada uno vaya por su lado y dejemos la amistad que tantos quebraderos de cabeza nos está dando.

¿Qué ocurre? Que entre que nuestro grupito era pequeño y que se fue mi amigo y su novia de él, si encima me peleo con mi mejor amiga el grupo se rompe. Lo sé perfectamente. ¿Por qué? Digamos que el resto de amigos son personas muy buenas, en las que confío plenamente, pero son aburridas. Nunca quieren salir, son muy callados, no suelen opinar sobre nada en una conversación... Y esto también me cansa.

Por otro lado, veo que quiero hacer amistades nuevas pero "no puedo" ¿Por qué? Bueno, esa amiga de la que os he hablado antes es muy posesiva, ella quiere buscar su grupo de amigos e incluirme a mí en él, no me deja tener un grupo propio de amigos. Si ve que hablo más con una chica o con un chico, los mira mal y no para de soltarme comentarios malos de esas personas. Siempre da la casualidad de que la gente a la que empiezo a conocer le cae mal. Y claro, yo entre una persona que casi no conozco y mi amiga prefiero a mi amiga, pero ya se está pasando, discuto con ella muchísimo, pero nos queremos mucho y nos perdonamos, y vuelta a empezar.

En definitiva, en relaciones de amistad: mi mejor amigo deja de serlo, discuto muchísimo con mi mejor amiga, y el resto (que son pocos) no me aportan diversión ni conversación, son sosos para quedar y para charlar.

En cuanto a mi familia, también es pequeña: solo tengo un tío, con su mujer y mis primas, pero viven lejos. Además, mis primas son mayores que yo, no tengo ningún primo de mi edad.

Con mi madre me llevo perfectamente, y con mi padre... A ver como lo cuento: antes discutíamos muchísimo, ahora poco. Sin embargo, nuestra relación es muy fría: ya hablamos más como conocidos que como padre-hijo. Llevo años sin contarle mis cosas, y de hecho, hay cosas que le oculto (solo a él) para evitar discusiones (porque haga lo que haga le parecerá mal).

Tanto se ha enfriado mi relación con mi padre que a veces me siento un trabajador suyo que su hijo. No es que esté todo el día pidiéndome cosas, pero ya en lugar de "¿Cómo te ha ido el día?" o cosas así, solo me habla para cosas como "¿Sabes como se hace esto en ordenador?" "Imprimeme esto" "¿Puedes ir a comprar tabaco?"

Mis hermanas también son mucho más mayores que yo pero nos llevamos muy bien. Pero claro, ellas ya están independizadas y con hijos, y digamos que tienen su propia vida. Insisto en que somos muy cercanos y nos llevamos muy bien, pero entiendo que no pueden estar conmigo tanto como si fuera un hermano que tuviera más o menos mi edad (19).

Estoy cansado, de mi padre y de mis amigos, aunque los quiero mucho.

Total, que todo esto me hace pensar en por qué no me fui de mi ciudad. Tenía que haberme ido a Madrid: ahí conozco gente, tengo amigos, estudiaría lo que realmente me gusta, haría nuevos amigos, saldría, conocería nuevos lugares, y creo que me vendría bien para fortalecer mi amistad con los de aquí y la relación con mi padre. Pero me da mucha, muchísima pena irme por mi madre, para el que soy "el niño de sus ojos" su único hijo varón y el más pequeño con diferencia. Mi padre trabaja muchas horas, mis hermanas están independizadas, y la pobre se quedaría sola gran parte del día...

¿Qué debo hacer? ¿Qué me aconsejáis?

4 Respuestas

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Lo mas sencillo, vete a Madrid, estás muy cerca de Barcelona, tu vida cambiará, tu futuro será diferente, cambiarás de aires, de personas tóxicas, no te detengas a pensar que si tus padres, que la familia, que los amigos, necesitas nuevos horizontes, tienes la edad perfecta para el cambio, tu vida es muy importante, dale el valor que se merece

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Bueno no soy experta en este tema pero si en lo que a cambiar de ciudad se refiere, yo vengo de donde tu quieres ir ;)

Después de leer tu historia me da la sensación de que lo que te ocurre es que nada va como tu esperabas que fuera al quedarte en tu ciudad, sólo tu puedes decidir que hacer, y para tomar una decisión debes pensar en ti y sólo en ti, tu madre te quiere con locura y sólo quiere lo mejor para ti y seguro que si ella supiera que allí no eres feliz te diría que luches por serlo, eres muy joven y es una lastima que te sientas así.

Las amistades con la distancia no siempre se fortalecen, a veces se enfrían (y se de lo que hablo) pero quien deba quedarse en tu vida se quedara, a veces los caminos se separan y años después se vuelven a unir o no se separan nunca o no se unen después, sea como sea agradece lo que aprendes con cada persona que se cruza en tu camino y disfruta con ellas el tiempo que las tengas cerca y cuando alguien se vuelve "tóxico" es mejor tomar distancias para poder ver las cosas desde otra perspectiva.

Tienes 19 años y te queda muchísima vida por delante, lucha por lo que te pueda hacer feliz, que la vida es muy corta y nos puede cambiar de repente...

Mucho ánimo y que seas muy feliz

Raquel

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El discurrir de la vida de cada persona no es una línea contínua con resultados previsibles en donde se cumple la relación causa/efecto, sino un camino que fluctúa con altos y bajos dependiendo, no sólo del comportamiento nuestro sino del de los otros.

Por otra parte, hay etapas de la vida que suponen una involución (no necesariamente negativa) o, sencillamente, un cambio, derivado de la situación personal y del momento de cada persona. Has tenido unas circunstancias y unas relaciones sociales y familiares hasta dar ese "salto" que implica convertirse en adulto y ello implica pasar de una cierta estabilidad escolar y social a otro momento que no tiene por qué ser inestable, pero que es claramente distinto.

El cambio a la vida universitaria implica conocer nueva gente (para tí y para tus amigos) y relaciones que antes parecían inalterables y "para toda la vida", ahora ya no lo son. El paso de la amistad a la pareja tiene mucho que ver con esto y cuando un amigo/a comienza esa fase de pareja, necesita un nuevo espacio, si bien no siempre se rompe con el vínculo anterior (aunque en este caso haya sucedido así). Todo ello, al margen de que hayan surgido disparidades de criterios o disputas o puntos de vista distintos.

A partir de ese momento, el grupo comienza a diluirse y se van estableciendo nuevos vínculos con otras personas, generalmente derivados del cambio del instituto a la universidad.

No debes lamentarte por lo que pudiste hacer y no hiciste. Probablemente el final hubiera sido igual. Tomaste una decisión y fue "tu decisión", ni buena ni mala, simplemente, "la tuya". Ahora tienes por delante una apasionante tarea: por un lado, afrontar con ilusión y entusiasmo tus estudios, conducentes a un futuro profesional; por otro, establecer vínculos con otras personas entre las cuales, posiblemente tampoco entre esa chica "posesiva" a la que haces referencia. Antes o después tendrás una pareja y te desvincularás igualmente del grupo actual (aunque sigas siendo amigo) porque también entrarán en juego otros amigos (los de tu pareja) e incluso, amigos comunes.

En cuanto a las relaciones familiares, si tienes necesidad de comunicación, toma tú la iniciativa. Tal vez tu padre no sepa o no haya caido en la cuenta, pero ahí estás tú para recordárselo y demandar su ayuda/conversación cuando lo necesites.

En definitiva, estás pasando un -no me atrevería a llamarlo- mal momento o un momento diferente en tu vida, derivado del paso de la adolescencia a la adultez. Hay que hacer ciertos reajustes, pero se sale victorioso de la situación. Es algo pasajero. Te lo dice la experiencia de un psicólogo.

Un saludo y a tu disposición si en algo puedo serte útil.

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Solo voy a dar algunas "píldoras" que pueden darte luces en tu situación actual y futura: 1.Para conocer en profundidad a una persona no escuches ningún comentario que los demás dicen de ella... escucha atentamente los comentarios que ella hace de los demás. 2.Elige bien tus batallas porque hay ocasiones es más importante tener paz que tener la razón. 3.Dí lo que sientes o esos silencios te harán ruido toda la vida. 4.Lo único que nunca pasará es tu familia: Tus amigos podrán dejar de serlo, tu pareja podrá dejar de serlo pero, quieras o no, tu jamás dejarás de ser hijo y ellos tus padres. 5.La ventaja de decir siempre la verdad es que aleja a los falsos amigos. Buen provecho.

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