Está claro que el ir a la discoteca es una conducta de riesgo, y con ello no estaría favoreciendo vuestro noviazgo y posible matrimonio. No estaría favoreciendo el poder formar un hogar estable, en donde vinieran al mundo niños sanos y felices, bien educados cristianamente. Hoy en día las costumbres están más estragadas que en el tiempo de tu madre. Hazle caso. Disfrutar de la juventud no es ponerse en riesgo ni dedicarse a divertirse, sino que hay que aprovechar todas las etapas de la vida para hacer el bien de verdad. Ayuda a tu novio a ser la mejor persona posible, a que se encamine a hacer el bien de verdad, estando en gracia de Dios, frecuentando los Sacramentos y haciendo oración, haciendo tú lo mismo. Ayúdalo a vivir las virtudes, no a dejarse llevar por vanas apetencias.
No sería buena preparación para el matrimonio el incitarlo a la mera diversión, ya que precisamente en el matrimonio a lo que uno se compromete es al amor de verdad, y esto siempre exige esfuerzo y renuncias, pero que sin duda valen la pena. Míralo todo según Dios.
Te dejo lo siguiente para leer:
http://opinionestemasdeactualidad.blogspot.com.es/2016/09/aprovechar-la-vida-26-de-septiembre-de.html
http://opinionestemasdeactualidad.blogspot.com.es/2015/06/aprovechar-la-propia-vida.html
http://opinionestemasdeactualidad.blogspot.com.es/2016/06/al-hacer-el-bien.html
http://opinionestemasdeactualidad.blogspot.com.es/2016/06/ante-la-enfermedad.html
Está claro que el ir a la discoteca es una conducta de riesgo, y con ello no estaría favoreciendo vuestro noviazgo y posible matrimonio. No estaría favoreciendo el poder formar un hogar estable, en donde vinieran al mundo niños sanos y felices, bien educados cristianamente. Hoy en día las costumbres están más estragadas que en el tiempo de tu madre. Hazle caso. Disfrutar de la juventud no es ponerse en riesgo ni dedicarse a divertirse, sino que hay que aprovechar todas las etapas de la vida para hacer el bien de verdad. Ayuda a tu novio a ser la mejor persona posible, a que se encamine a hacer el bien de verdad, estando en gracia de Dios, frecuentando los Sacramentos y haciendo oración, haciendo tú lo mismo. Ayúdalo a vivir las virtudes, no a dejarse llevar por vanas apetencias.
No sería buena preparación para el matrimonio el incitarlo a la mera diversión, ya que precisamente en el matrimonio a lo que uno se compromete es al amor de verdad, y esto siempre exige esfuerzo y renuncias, pero que sin duda valen la pena. Míralo todo según Dios.