Qué hago con mi hija celosa, violenta y desobediente?

Si ya se ha probado prácticamente todo en casa, lo mejor es derivar el problema a un psicólogo para que inicie terapia individual o incluso familiar si es pertinente. Los temperamentos complicados deben ser gestionados de la mejor manera, de lo contrario pueden volverse peores con el tiempo. Este profesional llevará un seguimiento y os irá dando pautas a seguir.

Alberto Belmonte - Psicólogo Clínico Online

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Se te ve enfadada con tu hija y esto no te ayuda. Y lejos de achacarle a tu hija la responsabilidad, más bien tienes que ver qué puede estar ella percibiendo del ambiente, por ejemplo de la educación que tú le brindas, etc. Yo te recomendaría aprovechar esta ocasión para mejorar todos los factores al respecto, lo cual siempre es posible. No temas por tu otra hija, ya que a ella la tienes que educar para que actúe siempre bien, pensando en hacer el bien de verdad, y para que responsa siempre también bien, que por cierto es lo que más la va a proteger. De las opciones que dices que has probado, da la impresión de que es todo muy forzado. Si mejoras por dentro, atendiendo el aviso, por supuesto que con la gracia de Dios, esto enseguida se traslucirá en tu conducta y tu hija lo captará. Si le das una orden, por ejemplo, no se trata de establecer un pulso de a ver quién puede más, sino que siempre sabiendo por qué mandas lo que mandas, todo orientado finalmente al bien de verdad de todos, y a Dios. Y si le das una orden, por ejemplo, y ella se niega, por ejemplo, siempre puedes atender las razones, etc., y no querer ciertos resultados más allá de lo razonable, quizá por haber perdido el norte del objetivo principal recto al que debe todo encaminarse.

Tienes que buscar ayuda de un profesional para que te de herramientas para manejar asertivamente esa situación. Es demasiado complejo lo que describes en tu relato como para poderte orientar desde la distancia pues su comportamiento puede obedecer a muchas cosas como: si fueron hijos deseados o no, demasiados mimos antes de recibir la noticia del embarazo, el cambio en las horas de tomar los alimentos en la casa, cambios en la alimentación, el temor a estar fuera de la casa, el alejarse de sus familiares "porque hay que cuidar la bebe" o en el mejor de los casos todo eso junto y más.

Sucede que esos años, los primeros del niño, son muy importantes, para el resto de su vida, lo acepten o no, lo que pasa, de alguna manera influye en su vida, y de adulto, y quizás, durante toda su vida, llevalo a un psicopedagogo o como se llame ahí el sicologo para chicos, para que busque la causa, para que se pueda corregir, y luego no sea un problema más serio. Por más buena volutad que tengan los padres, no siempre, y digamos, muy a menudo, no saben el porque de la conducta extraña de los chicos. Sds.