Lo que puedes hacer es querer mejorar a tu padre, y para hacerlo bien, esto tiene que estar por encima de dejarte llevar por tus intereses vanos o desordenados. Y así tienes que buscar el bien de tu padre, por encima de tu orgullo, por encima de querer quedar bien ante él o bien ante otras personas, etc. Este ejemplo siempre se nota, y siempre actúa. Para poder hacer esto, ya que los intereses vanos o desordenados pueden mucho, tienes que estar en gracia de Dios, es decir libre de cualquier pecado mortal en el alma (sin perdonar), para lo cual te recomiendo los Sacramentos como la Confesión Sacramental.
Piensa que las cosas no mejoran desde la superficia meramente, sino que sobre todo desde el interior. Si quieres mejorar a tu padre, ten tú una vida bien encaminada hacia el bien de verdad, ten una vida con sentido, y así podrás ayudar a tu padre. Si vivieras una vida hacia ti mismo, no podrías, aunque quizá pretendieses que cambiase tu padre el cambiarse de guiarse por un interés, a hacerlo por otro, también egoísta; y esto no funciona.
Por supuesto que puedes ayudar a tu padre a estar en gracia de Dios, a cumplir los Mandamientos de Dios y de la Iglesia, a respetar el matrimonio con tu madre, si es que tienen un matrimonio válido, etc. Luego, por supuesto, que si vieras que existe un riesgo de algo concreto, tendrías que ver qué te corresponde hacer, para lo cual te recomiendo la oración; pero por supuesto que sin descuidar lo anterior, que es lo fundamental, ya que no se trata solo de evitar una posible conducta concreta, sino que de mejorar la conducta en general, y con algo sólido, para siempre.