Vamos por partes: 1.No existe repelente para los bichos que hay en el campo, así que supéralo. 2.Para que los bichos no entren a tu habitación usa mosquiteros y felpa en las aberturas de la puerta de acceso. 3.Los zancudos grandes son inofensivos pues no son hematófagos (chupadores de sangre). 4.La luz atrae los insectos así que no enciendas las luces hasta no estar dentro de la pieza. 5.Las arañas son de presencia obligada en los sitios rurales primordialmente.
Aclarado este asunto pasamos al manejo de tu fobia: Vas a hacer una retrospección de este momento hacia atrás visualizando tu temor hacia los bichos, día a día, mes a mes, año a año hasta llegar al origen de tu fobia. Cuando llegues allá regresarás desandando el camino que recorriste hasta llegar a ese primer recuerdo llegando al momento actual. Conocí a una chica que le tenía pánico a las aves y cuando veía a un canario en una jaula pegada a la pared ella pasaba pegada a la pared contraria, no iba al parque por miedo a las palomas y cuando un ave pasaba cerca de ella se quedaba paralizada como un palo. Después de hacer la retrospección llegó a la edad de cuatro años cuando en su casa habían gallinas y ella cogía los pollitos y los lanzaba al aire para ver como volaban y como es apenas lógico caían al suelo muriendo casi inmediatamente, luego los ponía en una caneca con agua para ver cómo nadaban e igual eran otros tantos pollitos muertos. Su madre al ver esa matanza de pollos le dijo "las gallinas se van a enojar con usted y le van a sacar los ojos porque toda mamá se enojan cuando les matan a sus hijos.
Luego la niña un poco mas grandecita jugaba con sus muñecas sentada en las escalas del patio donde tenían las gallinas y ya no volvió a jugar de esa forma con los pollitos como tampoco volvió a entrar al gallinero. Una señora palenquera chocoana que ayudaba con los oficios de la casa lavaba el gallinero con manguera y la niña vio como un pollito se le metió entre la chancla y el pie, vio como moría aplastado por el pie de esa mujer tan gigante y horrorizada observó al pollito aplastado con sangre por todos los lados. La señora con la manguera se lavaba el pie asesino y la chancla, cuando soltó la manguera para ponerse la chancla la manguera giro mojando a las gallinas que salieron del corral corriendo hacia las escalas donde estaba la niña jugando con sus muñecas y ella se acordó lo que le había sentenciado la madre "que le iban a sacar los ojos porque toda mamá se enojan cuando les matan a sus hijos", la niña pensó que en ese momento se cumpliría lo que le dijo la mamá se tapó los ojos mientras todas las gallinas pasaban sobre ella con la algarabía propia de huir del agua. Cuando ya me contó todo esto se hizo consiente de ese momento ya terminó su fobia por las aves aunque aún les tiene respeto.