No le debes echar la culpa a ella, sino que tienes que ver que tú no hiciste las cosas bien, ya que si hubieras tenido un noviazgo como Dios manda, no estaría tu novia embarazada (algo propio ya de cuando ya ha habido un compromiso para toda la vida dentro del matrimonio).
Ahora, tienes que empezar a hacer las cosas bien; por supuesto que suspender la convivencia fuera del matrimonio, confesarte, y también ayudarla a ella a lo mismo; no hagas nada meramente para complacerla, ya que de esa forma, entre otras cosas, además de no ayudarla realmente a ella, como ves, te quedas resentido por no obtener lo que querías. Piensa en el bien de verdad de tu novia, y de tu hijo, y que esto esté por encima de tus meros intereses, lo cual, sin duda que será muy bueno para ti.
No os habéis ayudado y este es el resultado; en lo inevitable, súfrelo con paciencia; y rectifica. Si hubieras hecho las cosas bien, esto no ocurriría, pero puedes rectificar.
Con ella, y en lo concreto, te recomiendo tener siempre conducta externa correcta, y, por dentro, no pierdas de vista el objetivo de hacer el bien de verdad. Ya has perdido bastante tiempo por pensar meramente en pasar el rato, o similar. Tómatelo como un pago por las equivocaciones pasadas. Los errores se pagan; no cabe duda. Y ella ahora está descontenta; pero en su situación es mejor, ya que quiere decir que su mismo organismo se rebela. Sé bueno con ella, y ayúdala a estar en gracia de Dios, y a tener una vida con sentido.